El Mecanismo de Retribución por Servicios Ecosistémicos Hídricos (MRSEH) que se impulsa en el Cumbaza tendrá una réplica en cuatro importantes ciudades de San Martín (Saposoa, Bellavista, Sisa y Lamas) que actualmente sufren de desabastecimiento de agua, con el objetivo de recuperar los bosques generadores de este elemento.
Este mecanismo tiene como objetivo que la población de Tarapoto, Morales y La Banda de Shilcayo cuenten a futuro con mayor cantidad y calidad de agua mediante los aportes a un fondo de conservación que luego se destina a recuperar las zonas degradadas de las partes altas donde nacen las aguas.
Saposoa, Bellavista, Sisa y Lamas, realizarán en los siguientes meses un Diagnóstico Hidrológico Rápido (DHR), para determinar con exactitud las condiciones de las cuencas que abastecen de agua esas ciudades, informó el Comité de gestión de la microcuenca del Cumbaza a INFOREGIÓN.
Este estudio a realizarse por representantes de las instituciones vinculadas al recurso hídrico en cada localidad y liderados por Emapa San Martín, incluye como primera etapa un proceso de capacitación a cargo de profesionales del Minam.
Con los resultados del DHR de cada localidad, Emapa San Martín actualizará su Plan Maestro Optimizado e incluirá en su estructura, un rubro de servicios ecosistémicos que facilite la participación e involucramiento de la población usuaria, en la recuperación de las zonas degradadas y afectadas que ponen en riesgo el abastecimiento de agua.
CUMBAZA
Actualmente, en la microcuenca del Cumbaza se viene impulsando el MRSEH a cargo del Comité de Gestión, que gracias al apoyo de numerosas instituciones públicas y privadas, ya ha conseguido que los arroceros asociados en la Junta de Usuarios Tarapoto, contribuyan 1 sol por hectárea en cada campaña.
Este dinero va al fondo de conservación que se invierte en las partes altas donde se encuentran las comunidades nativas, quienes emplean el fondo para realizar acciones de vigilancia a su territorio comunal y se evite la deforestación por personas ajenas a su comunidad.
Un segundo subsistema que se espera pueda funcionar en los siguientes meses, es mediante el aporte de los usuarios domésticos al fondo de conservación, para que también se invierta en recuperar la cobertura boscosa y espacios de alta diversidad biológica.
De esta manera, a futuro se aseguraría agua en mayor cantidad a más de 40 000 usuarios con conexiones domiciliarias, recreos turísticos y hoteles con piscina, así como a la industria y comercio de nuestra ciudad.