Desde el caserío de Consolado hasta el centro poblado de Chipaco se viene ejecutando un programa de recuperación de suelos de la parte alta del valle del Monzón (provincia de Huamalíes, región Huánuco) con el fin que en cuatro años los pobladores puedan sembrar productos como el café y cacao; como ya se siembran en otros sectores de este valle.
Para este propósito, la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), encargada del proyecto en coordinación con la Municipalidad de Huamalíes, ya cuenta con cerca de 500 inscritos a los que se les ha otorgado la semilla de la guaba y otros insumos.
El proceso consiste en sembrar semillas de guabas en forma directa a terreno definitivo. Según el ingeniero Pablo Esteves García, las guabas “cumplen su función de nitrificar e incorporar materia mediante sus hojas y reducen gradualmente las malezas existentes por debajo de ellas”.
Con esto, “ya se puedan sembrar algunos cultivos como la yuca, fríjol de palo, etc. Después de tres años, ya se pueda cosechar sus frutos y traen consigo fauna silvestre”, explica.
Juan Ramírez, agricultor de la zona, señala que los suelos del Monzón están degradados por los sembríos de hoja de coca y la única planta que puede ayudar es la guaba. “Al inicio no todos estaban de acuerdo, pero al final lograron entender y casi el 70% de la población está de acuerdo con el programa. Las guabas están en vivero ya listas para llevarlas a los terrenos definitivos”, informó a INFOREGIÓN.
Agregó que entre febrero y marzo, se estará transplantando las guabas (que se encuentran en viveros) a las chacras y que la parte alta del Monzón es muy distinta a otras zonas como Milagros, por ejemplo, donde ya se siembra cacao, pues estas no han sido afectadas por los cocales.