La propuesta del Ejecutivo de recortar en más de doscientas mil hectáreas el Parque Nacional Bahuaja-Sonene, en Madre de Dios, ocasionó el inmediato rechazo de diversas organizaciones ambientalistas del país que advirtieron que de aprobarse el proyecto, no sólo se atentaría contra una de las fuentes de biodiversidad más importantes del mundo, sino que además pondría en serio riesgo los avances logrados en la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) con los Estados Unidos.
Entidades como la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), la Asociación para la Conservación de la Cuenca Amazónica (ACCA), la Asociación Perú Verde, el Centro de Conservación, Investigación y Manejo de Áreas Naturales (CIMA), la Asociación Peruana para la Conservación de la Naturaleza (APECO), el Centro para la Sostenibilidad Ambiental de la UPCH, la World Wildlife Fund (WWF), entre otras, mostraron su preocupación por el recorte que pretende realizar el Gobierno en el área del parque correspondiente a Candamo, para el establecimiento de un nuevo lote de hidrocarburos.
Los ambientalistas alertaron que la propuesta, que incluso ocasionó la inmediata renuncia del Intendente de Áreas Naturales Protegidas, Luis Alfaro, por oponerse a la reducción de parque, pone en riesgo el TLC que se busca suscribir con los Estados Unidos, pues contradice los compromisos ahí contemplados, entre ellos el capítulo Nº 18 que señala que es inapropiado promover el comercio o la inversión mediante el debilitamiento o reducción de las protecciones contempladas en las legislaciones ambientales de las partes.
En dicho tratado, ambas partes entienden por legislación ambiental toda ley dada con el propósito de proteger el medio ambiente o la prevención de un peligro para la vida o la salud humana, animal o vegetal, mediante la protección o conservación de flora y fauna silvestres, incluyendo las especies en peligro de extinción, su hábitat y las áreas naturales bajo protección especial.
Candamo
Según las organizaciones ambientalistas, la zona que sería recortada, la de Candamo, mundialmente reconocida por su gran belleza y riqueza natural, es un área del Parque Nacional clasificada como una zona de protección estricta por ser el espacio más vulnerable del mismo y sin el cual el parque ya no tendría razón de ser, pues se perderían definitivamente los objetos de conservación.
Se indicó que se estableció precisamente su protección y conservación porque alberga especies únicas y particularmente vulnerables a la presencia del hombre, como el ciervo de los pantanos y el lobo de crin, y contiene ecosistemas únicos, como las sabanas húmedas de las pampas del Heath y el valle escondido del Candamo, con formaciones vegetales que lo convierten en uno de los parajes más fascinantes del mundo.
Asimismo, se alertó que el proyecto de recorte, presentado ya al Consejo de Ministros, afectaría también la pureza de la fuente de agua del Tambopata, una cuenca aún no habitada, y atentaría contra nuestro marco legal ambiental y de conservación de la diversidad biológica pues la Constitución, en su artículo Nº 68, obliga al Estado Peruano a promover la conservación de las áreas naturales protegidas.