José Luis Capella, abogado del Programa de Conservación de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental, SPDA, alertó que el eventual recorte de hectáreas del Parque Nacional Bahuaja-Sonene, en Madre de Dios, que impulsa el Gobierno, precipitará de inmediato la tala y caza ilegal, el avance de la frontera agrícola desordenada, así como la pérdida de la diversidad biológica y de los valores de servicios ambientales de la zona.
El abogado ambientalista detalló que la propuesta de recortar 200 mil hectáreas del Parque Nacional, en la zona del Candamo, no tiene ningún sustento técnico y pondría en peligro esta zona, que es la principal prestadora de servicios ambientales a la población de Madre de Dios y se encuentra protegida por convenios y tratados internacionales, así como por la comunidad científica mundial.
“No nos oponemos a la legítima intención del Estado de buscar y encontrar hidrocarburos, pero específicamente en esa zona existen valores más importantes como la diversidad biológica y los servicios que presta el bosque a la población. No creemos que deba ser sacrificado el Parque Nacional por la posibilidad de encontrar hidrocarburos en esa zona”, apuntó.