José Carbajal, integrante del Colegio Odontológico del Perú y de la Sociedad Odontopediatría, estuvo en el programa radial Diálogo Educativo, producido por INFOREGIÓN, y dio importantes pautas a los pobladores de la selva peruana para mantener una dentadura saludable y duradera.
“El cuidado de los dientes es muy importante para la salud en general, nos permite alimentarnos, por la masticación, y nos permite hablar, pues los dientes son un punto de apoyo para la lengua, para emitir sonidos, y estos dientes se tienen que cuidar, desde que somos niños con los dientes de leche, hasta cuando somos adultos o adultos mayores, ya con los dientes definitivos”, afirmó el dentista.
Resaltó, además, que una pérdida prematura de los dientes de leche provoca mal oclusiones, o malas mordidas, trastornos en las mordidas, que con el tiempo pueden causar una serie de complicaciones, como dolores en la articulación, dolores musculares, migrañas y dolores de cuello.
Las caries, dijo el especialista, que son causadas por una higiene inadecuada y el excesivo consumo de azúcares, como dulces, golosinas y gaseosas, avanzan rápidamente, y pueden ocasionar la pérdida de los dientes.
Por ello, recomendó un cepillado cuidadoso, que implica limpiar entre la encía y el diente, por un lapso de cuatro a cinco minutos, además de cepillar la lengua, que es donde quedan las bacterias que producen la caries y el mal aliento; además se deben cepillar los dientes tres veces al día o después de cada comida, incluyendo la ingesta de dulces.
“Es muy importante cepillar la lengua, cuando uno descuida su cepillado, al principio se pega una película delgada de bacterias sobre la superficie del diente, esto es tan delgado que el cepillo lo puede retirar, pero si pasan los días, en dos semanas esa película se endurece y se convierte en el sarro o calculo dental, y el cepillo ya no lo saca, necesariamente se va a tener que acudir a un dentista para hacer una limpieza profesional, por ellos las visitas al dentista deben ser obligatoriamente cada seis meses, para prevenir fastidios y dolor”, puntualizó.
Otra consecuencia del sarro, es que al adherirse al diente, genera una irritación, una inflamación de la encía, llamada gingivitis, que es leve, pero que conforme avanza y si no hay cuidado adecuado, comienza a infectarse, se da la pérdida del hueso, pérdida de la encía, del soporte del diente, y el diente comienza a moverse hasta que se cae, por ello la calve de todo es la limpieza una buena alimentación.
Sin embargo, si no existiera la posibilidad de tener acceso al cepillo dental o a la pasta dental, el odontólogo Carbajal recomendó masticar después de cada comida, alimentos crudos y duros, como manzana, zanahoria o apio, los cuales van a permitir cuidar los dientes, “tan igual o mejor que el cepillo”.
Sobre el reemplazo de la pasta dental, dijo que se puede utilizar, como máximo dos veces por semana, bicarbonato diluido en agua.
Sobre los cítricos, como naranjas, mandarinas, limones o camu camu, que contienen alto grado de vitamina C, dijo que comerlos en exceso puede dañar la superficie de los dientes por lo que deben consumirse de forma moderada, y después de hacerlo, enjuagarse la boca con agua.
José Carbajal señaló que el cuidado dental se inicia desde que aparece el primer diente, aproximadamente a los seis meses de edad, y que los padres pueden realizar la limpieza con una gasa envuelta en el dedo, embebida en agua hervida fría, se frota los dientes del bebé y se mantienen limpios.
Después, cuando ya se llega a la infancia, se debe usar cepillo y pasta dental o el consumo de las frutas ya señaladas. Finalmente, en la adultez, o adultez mayor, se presentan enfermedades en las encías y se pierden los dientes, por lo que se debe reemplazar los dientes perdidos para que así no se pierda la función de poder alimentarse o hablar correctamente.
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