Recojo de caracol gigante se vuelve costumbre en provincias de Amazonas

El Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), organismo adscrito al Minagri, realizó jornada cívica de evaluación, recojo y destrucción de caracoles (Achatina fulica) en el distrito de Cajaruro, provincia de Utcubamba, región Amazonas.

Un equipo de sanidad vegetal del Senasa, junto a instituciones aliadas como el Programa Juntos y pobladores del Centro Poblado José Olaya, recorrieron la zona urbana (aproximadamente tres hectáreas) para colectar más de 80 kilos de caracoles.

Luego de las continuas capacitaciones del Senasa en diferentes provincias de la región Amazonas, las jornadas de recojo se han vuelto costumbre entre los pobladores y agricultores, se informó a INFOREGIÓN.

Los ciudadanos reconocen las graves consecuencias que pueden causar el consumo y manipulación del molusco sin protección; el caracol gigante africano representa un grave riesgo para la salud de las personas, pues es capaz de causar diversas enfermedades como meningitis, bronquitis, trastornos intestinales, encefalitis, leptospirosis, entre otras.

Es una de las especies más dañinas para la agricultura, atacando a muchas variedades de hortalizas y frutales como el café, cítricos, banano y cacao.

Se alberga en zonas cálidas y húmedas, y en las noches sale a alimentarse. Evitan el sol y se refugian durante el día en troncos, piedras, debajo de la basura o desperdicios. Es así que puede adaptarse fácilmente a muchos ambientes como zonas de cultivos, zonas urbanas, bosques y riveras de ríos.

Entre las recomendaciones se busca evitar el contacto directo con esta especie y usar guantes o bolsas de plástico, sumergirlos en agua con sal y enterrarlos para su eliminación.