Los biólogos Fred Vasconcelos, Giussepe Gagliardi y el veterinario Luigi Schettini comentaron el estudio que pretende determinar los cambios en el consumo de carne y pescado que han sufrido las familias en la cuarentena por el COVID-19 y localizar los sectores de población más vulnerables que han visto peligrar su Seguridad Alimentaria a través de una encuesta. Así lo hicieron en el espacio Biologando, conducido por el Blgo. Sandro Chávez, past Decano Nacional del Colegio de Biólogos del Perú.
Vasconcelos detalló cómo es que nació la idea de realizar el trabajo mencionado. Ante la imposibilidad de hacer encuestas presenciales por el COVID-19 y la crisis en seguridad alimentaria en Latinoamérica, se busca indagar cómo es que en ese rubro la pandemia afecta a la población rural más pobre, que consume mayormente la carne de monte, precisó.
Seguidamente, Gagliardi dijo esta idea llevaba dos años de planteada. En el caso del Perú, se han contactado con entidades y grupos organizados para poder realizar una muestra más amplia en este estudio. Detalló algunos problemas en la reunión de datos para el sondeo. Al respecto, Schettini recordó las complicaciones para realizar el estudio entre las comunidades indígenas.
Gagliardi citó que se compartirán los resultados con las personas que accedieron a participar en el estudio, así como también se contempla editar una publicación sobre este. Vasconcelos recordó que el sondeo en el Perú empezó el 27 de mayo, sin fecha de cierre por el momento, pues el virus sigue afectando a muchas poblaciones.
Gagliardi dijo que esta iniciativa tuvo un origen peruano-brasileño que se extendió hacia más países como Colombia y Uruguay, mientras se hacen coordinaciones para incluir a más naciones de la región. Vasconcelos detalló cómo se desarrolla el sondeo en Brasil y las dificultades que tienen, además expresó du interés para que el estudio tenga un universo más amplio.
Schettini informó que la encuesta es voluntaria, anónima y toma entre 15 a 20 minutos poder desarrollarla. Al respecto, Chávez destacó que el desarrollo de este tipo de iniciativas ayuda al diseño de estrategias, para también retornar a una alimentación menos hostigante con la fauna silvestre.