Una brigada de profesionales del Ministerio de Salud (Minsa) brindó más de 500 atenciones en una campaña médica integral realizada en las localidades de Montetoni, Maranquiato, Camisea y Santa Rosa de Serjali (Cusco), y en Atalaya (Ucayali), se destacó.
La Oficina General de Defensa Nacional (OGDN) delMinsa gestionó el desplazamiento de una brigada de médicos de las especialidades de pediatría, medicina general y ginecología, a fin de evaluar el estado de la salud de esta población.
Durante la jornada de salud, realizada del lunes 11 al viernes 15 de agosto, los profesionales de la salud brindaron atención en puestos de salud, entregaron medicamentos de forma gratuita y realizaron visitas domiciliarias para evaluar los casos de urgencia debido a problemas por infecciones respiratorias agudas (IRAS) y neumonías, reportados en las últimas semanas.
La intervención sanitaria permitió analizar la situación de alta vulnerabilidad por causa del aislamiento poblacional y reforzar la vigilancia epidemiológica en dichas localidades.
Además, se reforzó las medidas preventivas para proteger a la población frente a los riesgos a la salud que ocasionan las bajas temperaturas en la zona.
La campaña de salud contó con el apoyo de las direcciones regionales de salud de Cusco y de Ucayali, y de la empresa Pluspetrol, consorcio encargado para la explotación del gas de Camisea. También participaron representantes de los ministerios de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Cultura, Vivienda y Educación.
A principios del mes de agosto, el presidente de la República, Ollanta Humala, junto a una comitiva oficial, llegó a la comunidad de Montetoni para supervisar personalmente la atención que brinda el Estado y las necesidades de salud y educación que tienen las comunidades.
Son cerca de 550 habitantes de las comunidades nativas que habitan dentro de la Reserva Territorial Kugapakori Nahua Nanti, que fue creada por el Estado en 1990 para proteger el territorio y los derechos de los pueblos que tienen poco tiempo de contacto con la sociedad.
Frente a esta realidad, el Estado respeta el derecho de estos pueblos a ejercer su cultura conforme a sus propios términos. En este caso, respeta su decisión a vivir en aislamiento. Además, trabaja con los líderes indígenas para acercar los servicios básicos del Estado, como los servicios de salud.