PUNO. El 12 de mayo pasado, Olger Lipa de 22 años fue detenido por la Policía Nacional. Lipa acababa de agredir física y psicológicamente a su esposa en el interior de su domicilio en Putina. Sin embargo, este hecho no es aislado, pues, en promedio, se reportan diez casos diarios de violencia familiar, sexual y otros de alto riesgo, teniendo en cuenta que en el 2020 se reportaron 3888 denuncias.
La realidad no cambia en lo que va del 2021. Según el Centro de Emergencia Mujer, hasta marzo, se han contado 1167 casos. Pero, es importante precisar que no todos los casos son denunciados y, por ende, no se incluyen en la estadística.
Si bien los casos bajaron respecto a los años anteriores, esto se debe a que la institución dejó de funcionar durante abril, mayo y junio, registrando cero casos. El efecto de la pandemia en la armonía de los hogares aún no está definido. Entre los hechos de violencia, se contaron 107 de tipo sexual y durante el año 2020, se reportaron 363.
Relacionado a casos de menores de edad, la psicóloga Bertha Hualpa dijo: “cuando son pequeños hay que enseñarles a cuidar su cuerpo (…), nadie puede tocar sus genitales y si alguien lo hace tienen que avisar”, dijo al tiempo de señalar que es importante entablar un diálogo abierto con nuestros hijos sobre sexualidad.
Cabe señalar que en cuanto a las regiones donde más se perpetuó la violencia familiar durante la pandemia, Cusco y Junín, presentan 2494 y 2067 casos, respectivamente. Después de ellos, se encuentran Lima Metropolitana con 1522, Huánuco con 1.337 y Ancash con 1199 casos.