Espacio Compartido. Sentido artículo de la socióloga puneña Martha Giraldo, luchadora política, fundadora del movimiento por los derechos humanos en los difíciles años ochenta y empresaria del turismo; sobre la actual problemática en Puno, los entretelones de la demanda “No a la minería, No a la explotación petrolera, No a los proyectos hidro-energéticos” y también sobre las otras aristas que se mueven en la zona y que también forman parte del conflicto como el contrabando, la minería informal descontrolada y los cocales en expansión.
La economía de Puno descansa en la producción agropecuaria (papas, carnes, lácteos, cebada, pastos, quinua, oportuno mencionar a los laboriosos productores de la nuevas cuencas como Taraco, Progreso, Macarí, Umachiri, Llalli Mañazo, etc.), artesanía (tejidos a mano y pequeñas máquinas y telares, mucha de la cual se exporta y es producida mayormente por miles de mujeres quechas y aymaras), minería formal (Minsur, Arasi, Aruntani, Huacotto, etc.), turismo (hoteles, hospedajes, agencias de viaje, restaurantes, destinos rurales, guías, transporte), pesca artesanal y acuicultura, una fábrica de cemento, la única industria de la región!!!, algunos talleres de confecciones, una cooperativa cafetalera en Sandia, algunos centros comerciales formales en Juliaca y Puno; empleo en servicios, negocios diversos, en entidades públicas, ONG y algunas empresas de transporte formales.
Paralelamente, un gran contrabando, de tales volúmenes que se distribuye hasta Arequipa, Lima, Cusco, Madre de Dios, Abancay, que cuenta con soporte logístico de almacenes, camiones, buses, camionetas, talleres de reparación, tiendas de repuestos, seguridad, etc. y del que todos los ciudadanos de Puno nos servimos alegremente en la medida de nuestras necesidades (por ejemplo licores, galletas, chocolates, sábanas, artefactos, caprichos para el buen comer y vivir).
También minería informal descontrolada (quebradas amazónicas y al pie de glaciares en Ayapata, Coaza, Sina, Limbani, Phara, Patambuco, San Gabán, Ananea / Rinconada, sólo aquí se calculan más de 30 mil extractores y que se proveen de explosivos, botas, cascos, mamelucos, gas, combustible, linternas, miles de celulares, vía el contrabando), cocales en expansión en los valles de Sandia, San Juan, San Ignacio, San José, Putina Punko, San Gabán, Ayapata, Coaza, es vox populi que ahora se transforma en cocaína y se exporta hacia Bolivia.
Una compleja, desigual y tensa convivencia entre un pequeño sector empresarial formal y una gran masa de hábiles y avezados productores y comerciantes informales, ilegales, a los que el Estado no ve, no siente, no huele.
Empresario en Puno
Gastón Acurio afirmó en TV que ser empresario era “un privilegio, un honor y una responsabilidad”; y efectivamente así es, pero en Puno, reconocerse empresario es un acto de estoicismo, porque hay que resistir epítetos como “testaferro, explotador, miserable, vende patria”. Estos calificativos son endilgados a los mestizos formales, sean locales o venidos de fuera.
Los miles de empresarios informales simplemente no son empresarios, son parte del pueblo sufrido y excluido del sistema, aunque movilicen millones de dólares en mercadería ilegal, tengan flotas de buses, camiones, trailers, maquinaria pesada, usufructúen yacimientos mineros informales, cocales, cafetales, tiendas y mercados, casas de cambio, cientos de tiendas de computadoras y teléfonos, inmensas ferreterías, no sólo en Puno, en Arequipa, Tacna, Moquegua, Madre de Dios, Cusco, llegando incluso hasta La Paz, Río, Sao Paulo.
Ser quechua o aymara es garantía de contar con una patente étnica para todo lo permitido, legal pero también y sobre todo, para lo ilegal e informal que se pueda hacer. El normal, tradicional y ancestral intercambio fronterizo, ha devenido en economía paralela que mueve millones, corrompe y ejerce presión a todo nivel, de la misma forma que los grupos mineros informales y cocaleros.
No es casual ni fruto del abandono estatal y/o privado, que no haya inversiones productivas en la región (excepción de algunas mineras y hoteles), no se puede invertir en Puno, no se pueden comprar tierras, no se puede instalar industrias porque fracasan frente a la competencia del contrabando, no hay mano de obra calificada, no hay proveedores primarios de calidad y formales.
Sin inversiones productivas
Siendo la mayor zona productora de fibras y lanas, ni una sola planta que las lave y las industrialice ¿por qué? Ni una planta de beneficio de carnes, siendo la primera región productora de carne de res y ovino. Si no fuera porque están Marcos Degen y los curas de Juliaca, no habría ni trucha ni quinua envasada (empresas con asistencia, por ello pueden operar esforzadamente).
Puno es una zona emisora de gente emprendedora, laboriosa y triunfadora, ¿dónde no hay puneños exitosos sobre todo como comerciantes? En todo el Perú están con florecientes industrias, tiendas, galerías, ferreterías, incansables viajeros itinerantes, los que quedan en el campo, como agricultores y ganaderos, son los viejos, los abuelos, los discapacitados, los menos favorecidos en habilidades, capacidades y proyectos, como decimos entre nosotros, los huesos, ellos, son quienes en representación de los que están fuera, pero que nunca pierden la propiedad de tierras, casas y ganados, son quienes sufren el rigor de las actividades que descansan casi completamente en el uso de la energía humana como fuerza motriz, ya tenemos entonces un déficit en el campo, excepción de las zonas ganaderas modernas como Taraco, Mañazo, Cupi, Llalli, etc.
La profesionalización de miles de hijos del campo, en todas las profesiones existentes, sea en la universidad nacional pero sobre todo en las particulares de la región (4) y las sucursales de más de 12 de otras regiones, e incluso de 2 de Bolivia. Tod@s legítimamente aspiran a un título profesional, aunque luego no ejerzan y se dediquen, por ejemplo, a los negocios, blanqueando el dinero del contrabando, del oro ilegal, la coca.
Y otro gran sector como triciclistas, moto taxistas, ambulantes, cobradores, etc. que prefieren las ciudades al campo, éste, cada vez con menos brazos para el trabajo agropecuario y allí miles de hectáreas abandonadas o sub utilizadas, no hay tecnología que remplace la tracción humana.
No a todo
En este panorama, ya desmotivador y preocupante, en el que es frecuente la emergencia sea por frio, sequía o inundación, se grita a todo pulmón ¡No a las concesiones mineras, petroleras, hidroeléctricas! No a la presencia de empresarios foráneos!!! No a las empresas chupa sangre!!! No al turismo que sólo beneficia a las grandes cadenas chilenas!!! No a todo!!!
En Puno, tanto en el campo como en la ciudad, entre aymaras, quechuas y mestizos, la circulación de rumores y afirmaciones alejadas de la verdad es increíblemente profusa, ni la típica chismografía limeña se puede comparar y sólo para que se hagan una idea, unas cuantas perlas: “todo el agua es propiedad privada de García Pérez, que la vende al mejor postor y que es socio de las empresas que compran”; “el lago Titikaka está vendido a los chilenos”; “los hoteles Libertador son propiedad de Fujimori y sus socios chilenos”; “Casa Andina, cadena chilena”; “Suasi ha sido vendida a los chilenos”; “desde Suasi se bombea agua al norte de Chile”; “las empresas mineras pagaron canon sólo en la época de Toledo”; “García para incentivar la inversión extranjera, ha exonerado de impuestos, canon, regalías, a todas las empresas extranjeras”; “ todo el Perú está concesionado y vendido para la explotación minera” “las empresas mineras llegan de golpe y porrazo a tomar posesión de las tierras de los campesinos, y los comuneros súbitamente se enteran que no son más dueños de ellas”; “los canadienses de Santa Ana, nunca realizaron la consulta previa y no lograron la licencia social”; “Arasi es de chilenos”; “Minsur no paga canon porque son amigos de Jiménez Sardón y Garrido Lecca” y, así, hasta el infinito.
En este contexto ¿qué papel juegan los diversos medios de comunicación? La radio es el medio al que acceden todos, sea en el campo y las ciudades. Existen infinidad de emisoras locales que en muchos de sus programas, en quechua y aymara (especialmente) difunden como “noticias” decenas de afirmaciones similares o más alucinadas que las arriba consignadas; los programas de TV dan cabida a dirigentes, líderes, profesionales que sin ningún rigor ni objetividad dan por ciertas dichas afirmaciones y elucubran análisis y teorías de despojo, venta, saqueo, entreguismo de parte de empresarios y funcionarios.
Hace 25 años, conversando sobre este tema, me propuse por salud mental y tranquilidad espiritual no escuchar estas emisoras, pero, desde que vine a Suasi no puedo evitarlas, porque quienes colaboran conmigo, las tienen encendidas de mañana a noche, por ello es que conozco los contenidos y los mensajes y no me sorprende el resultado e impacto que han grabado en el alma, los corazones y pensamientos de miles de profesionales, comerciantes, contrabandistas, narcotraficantes, etc., etc.
Los actores
¿Quién es Walter Aduviri Calizaya? Hijo de comuneros de Mazocruz (provincia de El Collao), contador público, docente universitario, alpaquero a la distancia (pastores cuidan su rebaño ¿Cuántas alpacas? no pude averiguar), regidor saliente de la Municipalidad de Mazocruz.
Durante los sucesos de abril de 2004, que culminaron con el asesinato de Cirilo Robles, alcalde de Ilave, destacó por sus capacidades de organización y movilización de la juventud, dando muestras de arrojo, audacia y osadía. Una vez elegido el nuevo alcalde, los tenientes gobernadores (verdadero poder en la zona aymara), impusieron a Aduviri -considerando los méritos reconocidos y la formación profesional de contador- como jefe de almacenes de la municipalidad de Ilave, durante su gestión mostró otras facetas como prepotencia, intimidación, abuso y soberbia, se dice que habría cometido peculado y llevado doble control, por lo que fue despedido y tendría un juicio y el expediente estaría en Contraloría.
La ciudad de Ilave no se sumó a las movilizaciones. Será porque conocen a Aduviri? Nunca olvidar que quienes dirigieron la huelga que culminó en el asesinato de Robles fue liderado por los tenientes gobernadores.
¿Cuándo, dónde, quienes y con qué objetivos se formó el Frente de Defensa de los Recursos Naturales que preside Aduviri y a nombre del cual en supuesta defensa de la madre tierra recusa toda actividad minera? Poco o nada se conoce sobre dicho frente, todo hace suponer que es una organización que se activa en función de eventos concretos, tal vez importante cuando rechazaron la creación de la Reserva Aymara Lupaka; fuera de la comunicación enviada y tramitada por Lezcano al Inrena en 2004, firmada por Aduviri, no he podido recabar nada más al respecto.
Presidentes demagogos
Los presidentes Jiménez, Fuentes y Rodríguez, autoridades regionales grises, incapaces y demagogos, junto a consejeros, alcaldes y regidores, nada efectivo han hecho por la región. En campaña, todos sin excepción, ofrecen promesas sin límites y todos también apelan al electorado quechua aymara por ser abrumadoramente mayoritario tanto en el campo como en las ciudades. Los dos ex presidentes regionales y el actual, han tenido discursos anti-mineros, anti-empresa, anti-inversiones y han alentado posiciones de enfrentamiento con el Gobierno Central por su lejanía, desinterés y ausencia. Han sido presas de sus discursos, escasa gestión y deficiente capacidad de inversión. Ninguno propuso cambios que desarrollen la región, sólo pequeñas obras y mucho asistencialismo, que ahonda la conducta pedigüeña, mendicante y de victimización de líderes y comuneros.
Respecto de Vasty Lezcano, Abraham Ccauna, Hermes Ccauna, públicos agitadores senderistas que sin hipocresías ni medias tintas participan de la actual asonada, qué puedo decirles, que andan sueltos y sin temores.
Ayer lunes salió un artículo en el diario Los Andes ¿quiénes están detrás de Aduviri? Hay que leerlo para tomar conciencia de hacia dónde apuntan verdaderamente las acciones aymaras.
Decirles con tristeza, que no imaginan cómo los campesinos aymaras se portaron en la ciudad los días del paro, que fueron una verdadera ocupación: agresivos, racistas, intolerantes, abusivos con todos quienes se atrevieran siquiera a vender panes; tomaron por asalto plazas, parques, óvalos y ahí mismo instalaron cocinas, dormitorios, comedores y baños.
Varias cuadras a la redonda de la plaza de armas, los hedores eran insoportables, me pregunto ¿tienen derecho a agredirnos de esa manera? Luchar por sus reivindicaciones les da derecho a atropellar los de otros? Un valiente y humilde chofer aymara, responsable de conducir la ambulancia del hospital de Juli, comentó indignado que llevaba un niño aymara enfermo a Puno, y que hicieron los del piquete? Desinflaron las llantas, lo pegaron y aún no repuesto de la golpiza, fue testigo de los correazos que les propinaron a unos turistas italianos que desesperados por llegar a Puno, decidieron caminar y además, los desvalijaron sin reparos.
Saben de mi entrañable identificación con Puno, su geografía, el legado de los Caluyo y Pukaras, sus paisajes, la música única y que emociona hasta las lágrimas, pero desde tiempo, siento que con muchas de sus gentes, menos cosas me unen; respeto las diferencias culturales, pero también creo que hay valores universales como la verdad, el respeto, la tolerancia, la alegría por el éxito ajeno, el cuidado de niños y ancianos, la amistad sincera.
El aire está enrarecido y no por la altura, racismo y odio increíbles es lo que visto y escuchado en rostros de personas que creía amigas y eso me lacera el alma, por ello, es probable que salga de Puno, al menos por un buen tiempo, necesito sanar las heridas y renovar mi esperanza y alegría.
Les mando un abrazo fuerte, inmenso y curativo como el Titikaka.
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