La totora es una planta nativa emblemática del lago Titicaca con la que antiguas civilizaciones prehispánicas fabricaban embarcaciones y construyeron viviendas o enormes puentes colgantes, entre otras creaciones. En la actualidad, esta especie de nuestra biodiversidad es aprovechada de manera responsable y protegida por las mujeres artesanas aimaras que habitan esa zona del país, quienes aseguran su conservación.
Y es que gracias al emprendimiento denominado “Eco Artesanías de Totora Titikaka–Chimu”, decenas de comuneras aimaras demuestran que sí es posible poner en valor este recurso natural, cuidando las especies que habitan en los totorales y poniendo en práctica una experiencia concreta de economía circular. Esta iniciativa nace en el 2016 con el objetivo de empoderar económicamente a las mujeres artesanas indígenas aimaras a través de la actividad artesanal, aprovechando sosteniblemente los totorales.
Asimismo, contribuyendo a la reducción del uso de recipientes de plástico de un solo uso en el hogar, reemplazándolos por envases ecológicos hechos con totora, como fruteras, paneras, servilleteros, porta mates y porta celulares, entre otros, con diseños de la fauna que alberga el lago Titicaca. Al respecto, Ronal Callacondo, representante de dicha organización, explica que años atrás se quemaba la totora dañando así muchas especies de este ecosistema. “Se ha cambiado esa mentalidad, aprovechando ahora un recurso natural sin afectar el ambiente, protegiendo aves y peces en el lago Titicaca”, afirma.
Además, dice que tienen proyectado producir sorbetes (cañitas) en base a totora. “Tenemos una iniciativa de elaborar sorbetes sostenibles, ante la demanda del Sector que requiere materiales alternativos al plástico. Aún nos falta implementar algunos temas como el empaque, pero estamos seguros que lo concretaremos y seguiremos diversificando nuestros productos”, manifiesta.
Reconocimientos y próximos proyectos
Con visión innovadora y de crecimiento, “Eco Artesanías de Totora Titikaka–Chimu” está desarrollando un proyecto para usar la totora como material estructural en construcciones y edificaciones. “Esto nos permitiría ampliar nuestro mercado”, sostiene Callacondo. Esta experiencia fue presentada en Trujillo (donde también existe esta especie) a fin de que otras comunidades puedan aprovechar la totora para diversos usos, informó el Ministerio del Ambiente (Minam) a INFOREGIÓN.
Esta iniciativa ha sido reconocida a nivel nacional e internacional, haciéndose acreedor del Premio Latinoamérica Verde, Premio Nacional Ambiental Antonio Brack Egg 2017, e Innóvate 2017, entre otros. Dicho emprendimiento ha sido impulsado gracias a un trabajo articulado con la Municipalidad provincial de Puno, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado, adscrito al Minam; el programa “Turismo Emprende” del Mincetur, la ONG “Ser”, y la fundación Coremsa.