El hermoso puente Tocache, sobre el río Huallaga, la más importante vía de ingreso a esta provincia y una de las obras de arquitectura vial más destacadas de esta zona, se deteriora a pasos agigantados, en parte debido a la acción irracional de sus propios vecinos, los pobladores de Tocache que arrojan basura y aguas sucias en la propia estructura.
Estas sustancias de desecho, a las que se suma la falta de interés en su limpieza de parte de las autoridades responsables, están permitiendo que la corrosión y el óxido se impongan sobre el metal. La situación se agrava al punto que muchos viajeros empiezan a avizorar su inminente colapso.
INFOREGION Tocache pudo comprobar que gran cantidad de semillas de papaya arrojadas por inescrupulosos, adheridas a los fierros, han empezado a germinar, e incluso algunos arbustos ya tienen más de un metro de altura.
En varios tramos el puente ha perdido su pintura protectora y ya se observan pernos, tuercas, cables y otras partes cubiertas de herrumbre. Esta situación afecta la estabilidad y seguridad del puente, por lo que se hace un llamado a tomar urgentes medidas en su recuperación.
La regidora María Tarazona, enterada del caso, manifestó su decepción ante la poca higiene y preocupación por el ambiente de autoridades y población, mientras que la vecina Mercedes Guillén, del cercano pueblo joven Túpac Amaru, adujo que lanzar la basura al puente es la única manera de deshacerse de ella, pues el carro recolector pasa por la zona una vez al mes.