De agosto del 2008 a diciembre del 2011, se ha logrado establecer que en el Bajo Mayo y Huallaga Central (San Martín, Picota, Bellavista, El Dorado), las áreas de productores empadronados aptas para el cultivo de piñón, alcanzan a 10 mil hectáreas mientras que en el Alto Mayo (Moyobamba y Rioja), 5 mil has.
Así lo informó Félix Campos Flores, coordinador del Proyecto Piñón, quien señaló que dentro de fortalecimiento de las organizaciones de productores 20 fueron formadas y formalizadas por el proyecto, las mismas que servirán de base para la extensión de este cultivo en la región San Martín, a través del desarrollo de inversiones privadas con inclusividad y articulados a la cadena productiva.
Campos indicó que estas organizaciones han recibido de parte del Proyecto de Promoción del Piñón, las Escrituras Públicas de constitución, inscritas en los Registros Públicos con sus respectivos libros de actas y padrón de socios. Con estas organizaciones el proyecto ha establecido y adoptado 230 hectáreas de parcelas demostrativas, concentrándose la mayor cantidad de áreas en las provincias de Picota, San Martín y Lamas, con 178 productores socios de 11 organizaciones, 3 en el Bajo Mayo, 3 en Chazuta, 4 en Tres Unidos, 1 en Picota.
El personal técnico ha atendido y acompañado a estos productores con el fortalecimiento de sus capacidades (cursos, talleres, pasantías, etc.), asistencia técnica, insumos y el 50 % de los jornales para el mantenimiento de las parcelas demostrativas, instaladas mediante convenio entre los productores y el proyecto.
Asimismo se establecieron 10 parcelas demostrativas de introducción de cultivos asociados de piñón con productos de pan llevar, cultivos industriales y agroforestales para acompañar la competitividad del producto, con rendimientos importantes como 2 TM/Ha de maíz y 2 Tm/Ha de frijol en esta asociación.
También se establecieron parcelas demostrativas de asociación del piñón con Estevia, observándose una buena adaptación y obteniéndose buenos rendimientos, sin embargo, es necesario un mayor cuidado con el cultivo asociado por cuanto el producto aprovechable es la hoja y esta puede sufrir un deterioro especialmente durante la cosecha de este cultivo.
Campos Flores subrayó que en la ejecución del Proyecto, se han establecido seis módulos de crianza de abejas en las localidades de Chazuta, Comunidad Nativa Shilcayo, Juan Guerra, Mishquiyacu y Tres Unidos; instalados en lugares concéntricos a las áreas con cultivo de piñón para favorecer y mejorar la polinización e incrementar la productividad de frutos de piñón y acompañar su competitividad con ingresos adicionales por la venta de la producción de miel de abejas.
Asimismo los productores beneficiarios del proyecto han participado en cursos de capacitación, talleres, pasantías, días de campo, fortaleciendo sus capacidades el cultivo como alternativa de diversificación productiva, capacitación en gestión empresarial y administración de fincas, dirigido a socios de las organizaciones de productores, obteniendo como producto la elaboración de su Plan Estratégico Institucional, su Plan Operativo Anual y Acuerdo Interinstitucional de compra venta de granos de piñón con la COOPALP.
De igual manera capacitación en el aprovechamiento de productos y sub productos del piñón (elaboración de jabones a partir del aceite de esta planta que no reúne las características de calidad para su uso como combustible), cursos-taller teórico y práctico en la elaboración de compost a partir de la pulpa de los frutos y torta del piñón y capacitaciones a las organizaciones de productores en la elaboración de bioabonos (bioles, lombricultura), multiplicación y uso de microorganismos de montaña (MM), entre otros.
El coordinador del proyecto sobre la Implementación de módulos y capacitaciones para mejorar la eficiencia de cosecha y calidad en pos cosecha, informó que se han instalado 4 módulos de cosecha y post cosecha de piñón en las localidades de Tres Unidos, Chazuta, Solo y Juan Guerra, para resolver la eficiencia en el despulpado de frutos de piñón y el control de volúmenes y calidad de la producción para la comercialización.
Cada uno de los módulos ha sido equipado con una balanza de plataforma, una despulpadora eléctrica de frutos con una capacidad de obtención 150 Kg/hora de granos de piñón, 10 secadoras artesanales, 2 balanzas de reloj, un millar de envases, 10 parihuelas para el almacenamiento y 3 equipos de protección para cosechadores. Se les implementó además con mobiliario de oficina para apoyar la administración de estos módulos.
En lo que se refiere a la comercialización, Campos Flores señaló que el proyecto brindó apoyo en la comercialización de semillas de propagación de los campos de productores que mejor han conducido sus parcelas y observan un buen control sanitario así como también en la comercialización de granos para la extracción de aceite en forma experimental y para pruebas de calidad y rendimiento como carburante o su transformación en biodiesel.