El Instituto Bien Común divulgó un comunicado acerca de la categorización de la Zona Reservada Yaguas y otros temas vinculados a esta área que pasamos seguidamente a reproducir:
- El resultado de la consulta previa sobre la categorización de la Zona Reservada Yaguas revela que la totalidad de las 29 comunidades nativas consultadas han dado su conformidad para la creación de un parque nacional destinado a proteger la cuenca del Yaguas de actividades extractivas, tanto legales como ilegales, que pueden causar daños ambientales incluso a cuencas aledañas como las del Putumayo y Ampiyacu. La Zona Reservada Yaguas es clave para la reproducción de peces y otras especies de fauna que benefician a comunidades de las mencionadas cuencas. Sin embargo seis de estas 29 comunidades proponen que una porción de la actual Zona Reservada Yaguas sea categorizada como reserva comunal y no como parque nacional. Estos resultados constan en el acta del proceso de consulta (SERNANP/Noticias/05-06-2017)
- En el mismo documento figura el acuerdo alcanzado entre las 29 comunidades consultadas, sobre la necesidad de garantizar la realización de actividades de subsistencia en el ámbito del parque nacional. Para asegurar la sostenibilidad de las actividades de pesca se propone contar con la asesoría de instancias regionales como ARA Loreto y DIREPRO, y nacionales, como PEDICP. De otro lado, las comunidades están de acuerdo en establecer niveles de cogestión para la administración del propuesto parque nacional. Ambos puntos cuentan, según las actas, con el beneplácito del SERNANP.
- Es falso que el establecimiento de un parque nacional cerrará el acceso de las comunidades nativas al río Yaguas y a áreas donde hacen uso de recursos pesqueros, como se viene alegando. De hecho, con el fin de asegurar los derechos de uso de las comunidades existe una franja de 400.000 hectáreas que se extiende entre el límite de la Zona Reservada y los territorios de las comunidades nativas. Dicha franja comprende la parte baja del río Yaguas e incluye un sistema de cochas que presentan una gran diversidad de peces. (Ver mapa adjunto).
- Es precisamente con este fin, de asegurar los derechos de uso de las comunidades de la ribera del Bajo Putumayo, que actualmente se estudia la posibilidad de establecer en la mencionada franja de 400.000 hectáreas un área protegida, ya sea una Reserva Comunal o un Área de Conservación Regional en régimen de cogestión, figura que se viene implementando con demostrado éxito en varias cuencas de Loreto, entre ellas el Ampiyacu y Apayacu, en el límite suroeste del propuesto Parque Nacional Yaguas.
- Es para el IBC motivo de satisfacción el haber sido invitado por 24 comunidades nativas a participar en calidad de asesor en la consulta sobre la Categorización del Yaguas. Este gesto refleja una relación de confianza y colaboración construida a lo largo de dos décadas de trabajo conjunto por el ordenamiento del territorio, con importantes logros en el fortalecimiento de las comunidades nativas, la seguridad de sus territorios y la gestión de sus recursos. Dicho trabajo ha sido efectuado en estrecha coordinación con las federaciones indígenas FECONA, FECONAFROPU y FECOIBAP, y con conocimiento de ORPIO.
- Es preciso aclarar que el 3 de mayo de 2017, antes del desarrollo de la etapa de diálogo de la consulta, cuatro comunidades nativas decidieron separarse de FECOIBAP para crear una nueva organización, denominada OCIBPRY. Esta organización viene haciendo declaraciones públicas a nombre de todas las comunidades nativas del Putumayo, con apoyo de ORPIO, AIDESEP y COICA.
- Haciendo eco del SERNANP y el Ministerio de Cultura, el IBC saluda la transparencia y amplia participación que ha caracterizado a la consulta sobre la categorización de la Zona Reservada Yaguas. Partiendo de la identificación de 12 comunidades nativas directamente afectadas por la medida, la entidad promotora de la consulta acogió a otras 17 comunidades que en el camino manifestaron deseo de participar, algunas de ellas incentivadas por COICA.
- La categoría de parque nacional no es el resultado de una decisión caprichosa de última hora, sino que emana de un trabajo altamente participativo y acumulativo que se desarrolló en convenio con las tres federaciones indígenas de la zona a partir del año 2000. Más recientemente, en marzo de 2016, los representantes de estas federaciones fueron miembros plenos del Comité de Categorización de la Zona Reservada Yaguas.
- Imágenes aéreas revelan las operaciones de seis dragas dedicadas a la extracción ilegal de oro dentro de la Zona Reservada Yaguas, que se estima ocasionan el vertido mensual de 50 kilos de mercurio, elemento altamente toxico, en las aguas del Yaguas. De otro lado, se ha identificado a 8 cuadrillas de madereros ilegales que extraen un estimado de 240 mil pies tablares de cedro por mes. Estas actividades ilegales se realizan bajo las órdenes de unos pocos patrones locales que no dudan en recurrir a amenazas y acciones violentas en su afán de asegurar sus negocios. Ante esta situación, las comunidades nativas han hecho públicos repetidos pedidos para una intervención estatal que ponga fin a las actividades ilegales y que sancione a los responsables.
- El IBC lamenta profundamente que, como reacción al proyecto de construcción de un puesto de control destinado a poner freno a estas actividades ilegales en el ámbito de la Zona Reservada Yaguas, partes interesadas en la continuidad de las mismas hayan orquestado una campaña de desinformación orientada a entorpecer el proceso de categorización del Yaguas, confundir al público y desprestigiar a las organizaciones y líderes indígenas promotores de la iniciativa, provocando de paso la desunión de las comunidades nativas del área.
- El IBC mantiene su compromiso de continuar trabajando en las cuencas de los ríos Putumayo, Algodón, Yaguas, Ampiyacu y Apayacu, en pro del ordenamiento territorial, la gobernanza transparente y participativa y el bienestar de las comunidades nativas del área.
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