A pesar de ganar más de diez sueldos mínimos vitales al mes y de que llevan años viviendo en las instalaciones de la Universidad Nacional Agraria de la Selva (UNAS), numerosos profesores de esta casa superior de estudios se niegan a pagar algún tipo de alquiler.
Según informó el rector de la UNAS, doctor Milton Muñoz Berrocal, los profesores argumentan que el caso del cobro de alquiler que vienen ocupando está judicializado y, por lo tanto, esperan el pronunciamiento final del Poder Judicial para tomar alguna determinación.
“De acuerdo a una última homologación, los profesores principales ganan 6,607 soles mensuales y los profesores asociados, 3,300 soles mensuales. Aún así, se niegan a pagar. Esperamos que cada uno de los que ocupan las viviendas diga, por lo menos, cuánto está dispuesto a pagar”, afirmó la autoridad universitaria.
Cabe mencionar que por acuerdo de la Asamblea Universitaria se valorizó el alquiler de cada vivienda pero, a decir del Rector el informe presentaba costos demasiado elevados porque no se había verificado la infraestructura, dimensiones y condiciones.
“Por ello, se decidió que en un plazo de dos o tres años todos los docentes y administrativos vayan desalojando las viviendas de tal manera que la UNAS decida cuál es el mejor uso que le da”, explicó Muñoz Berrocal en entrevista con el informativo El Diario del Aire, una coproducción con INFOREGION que se transmite en Tingo María y Aucayacu.
La autoridad universitaria manifestó que el plazo no se está cumpliendo porque el doctor Teodolfo Valencia presentó una denuncia ante la Fiscalía y el Poder Judicial sobre “vulneración de derechos”.
Cargo de vicerrector
De otro lado, el doctor Muñoz Berrocal reafirmó que depende del propio vicerrector Wilfredo Zavala quedarse como autoridad universitaria o renunciar para asumir como primer regidor de la Municipalidad Provincial de Leoncio Prado ya que ambos cargos son incompatibles, según la Ley Universitaria.
También descartó la posibilidad de que Zavala vaya a pedir licencia como vicerrector ya que la norma universitaria, en concordancia con lo estipulado por la Asamblea Nacional de Rectores, determina que una autoridad universitaria que deja de ejercer sus funciones por más de 90 días vaca automáticamente en el cargo.