LIMA. Las exportaciones de café durante el 2020 sumaron 4 739 000 quintales (218 000 toneladas), con un precio promedio de US$ 138.92 por quintal, por un valor de US$ 658 millones. Representó en volumen un 6.3% menos en comparación con el año 2019, pero en valor tuvo un incremento de 3.30%, debido a una mejora en el precio promedio de los últimos 4 meses del año.
Un factor a destacar es el incremento del precio diferencial para el café peruano de calidad grado 1, que osciló entre 25 y 35 dólares sobre la cotización en bolsa, a pesar de las dificultades iniciales de venta debido a los problemas logísticos de cosecha y embarque ocasionados por el COVID-19, desde marzo a junio. Favoreció la demanda creciente para consumo en casa en los países consumidores de Europa y Estados Unidos, el obligado confinamiento en las grandes urbes.
Otro aspecto que llamó la atención entre los diversos actores locales del negocio del café, fue el fuerte incremento de precios en chacra y centros de acopio, propiciado por empresas exportadoras y cooperativas, pagándose hasta 10 soles por kilo de café pergamino. Esta especulación favoreció a los productos de cosechas retardadas de zonas altas. Se dieron comentarios más diversos, desde proceso de “lavado de dinero”, hasta compras obligadas para cubrir contratos cerrados en meses anteriores.
Creció consumo con café importado
El consumo nacional del café durante el año 2020 fue casi similar al registrado el 2019, salvo el incremento de las importaciones de cafés instantáneos, especialmente el elaborado con achicoria, según registros de la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria- SUNAT.
“Se importaron 7 383 000 kilos de café soluble, por un valor de S/52 842 000. Lo grave es que viene con cero aranceles, compitiendo deslealmente con el café peruano”, señala el presidente de la JNC
Dijo que el café soluble importado equivale a 18 456 toneladas de café verde (401 209 quintales), y aportan 0.595 gramos al consumo per cápita nacional, estimado en 23 000 toneladas (500 mil quintales) de grano verde.
“Si sumamos estas cifras al consumo del café peruano estimado en 0.742 gramos per cápita, Perú reporta un consumo total de 1 kilo 337 gramos, cifras importantes en un escenario de cuarentena debido al COVID 19”, refirió Córdova, quien también es socio de la Cooperativa Agraria Cafetalera Oro Verde, de San Martin.
Explicó que si bien el cierre de cafeterías y restaurantes, además de la baja de turistas extranjeros, afectó el consumo de café nacional fresco, se vivió un fenómeno interesante, especialmente en Lima, de oferta de nuevas marcas de café, promovida por productores individuales, cooperativas o pequeñas empresas familiares, ofertadas bajo la modalidad online.
“Este sistema de venta o comercio al menudeo de café cobrará mayor dinámica en el 2021, según encuestas a proveedores diversos,” agregó.
Amenaza de plagas
Un problema crítico que enfrentan los productores de café es el incremento de plagas y enfermedades en las plantaciones, principalmente de la broca, roya y ojo de pollo. En estos últimos años ha sido la broca la plaga que más daño viene causando en los frutos, estimándose para la cosecha del 2021 un daño por encima del 5% de la producción estimada, especialmente en plantaciones instaladas por debajo de 1,500 msnm.
El daño de la broca podría afectar a más de 300 mil quintales, especialmente en San Martín, Selva Central, Jaén, Cusco, Puno, Huánuco y en Amazonas, se informó a INFOREGIÓN.
“Hace varios años que advertimos de esta plaga, sin tener respuesta. Vamos a plantear que la Mesa Técnica de San Martin priorice una campaña de control a través del Gobierno Regional y municipios, porque con Senasa, nada sacamos”, advirtió el dirigente cafetalero al evaluar las perspectivas de la campaña cafetalera.