Lorenzo Castillo, gerente de la Junta Nacional del Café, resaltó que éste será un buen año para el café por los buenos precios alcanzados en el mercado internacional y destacó que la mayor demanda de café peruano se debe a que «en todas las regiones del país hay un proceso de mejoramiento de la calidad y desarrollo en la oferta creciente de cafés especiales”.
Agregó que en ese marco, su institución está auspiciando el Cuarto Concurso Nacional de Calidad, que ha tenido gran éxito en la etapa de clasificación regional por la calidad de las muestras presentadas y concluye esta semana con la Gran Final en Lima.
En declaraciones a INFOREGIÓN, Castillo remarcó que nuestro país tiene una demanda creciente de cafés de calidad y que la capacidad instalada y de producción en este momento no puede atender dicha demanda.
«Tenemos la oportunidad sobre todo para los pequeños productores de afincarse en los cafés de alta calidad. Inclusive hoy, hay los tostadores extranjeros vienen a visitar las zonas de producción del Perú para verificar las condiciones de producción y realizan contratos de compra a futuro por 3 ó 5 años», resaltó el gerente de la Junta Nacional.
Por ello estimo que el reto es mejorar los rendimientos por hectárea y mantener una calidad sostenible de confianza, desafío que se debe enfrentar a corto plazo para aprovechar la gran demanda entre 12 a 15% anual de crecimiento de nuestro café de calidad y de taza en el mercado estadounidense.
«El Perú es el líder del café con certificación de comercio justo, hace varios años estamos liderando ese nicho en la medida que los compradores aprecian y valoran el café peruano. Hoy los países escandinavos, particularmente Suecia, son los nuevos compradores de cafés de calidad, y hay que aprovechar esto», enfatizó.
Zonas cafetaleras
Castillo enfatizó que además de las zonas cafetaleras en el corredor nororiental, centro y sur del país que producen grandes volúmenes de este producto, hay otras zonas que se están destacando, fundamentalmente por la calidad del café que producen, como el caso del Alto Huallaga y también de Sandia, en Puno.
El dirigente cafetalero puntualizó la necesidad de que los pequeños productores se organicen con instituciones con criterios de sostenibilidad que les permita hacer una economía de escala para que de esa manera puedan acceder a mayores oportunidades y atender las demandas externas.
En ese sentido, resaltó que en la provincia de Leoncio Prado y en el corredor del Alto Huallaga se esté desarrollando actualmente un activo y pujante sector social empresarial agrupados en organizaciones con sostenibilidad, como las cooperativas Naranjillo y La Divisoria mientras que en Tocache se está viviendo el mismo proceso que permitirá dinamizar el tejido social empresarial de esa zona en el mediano plazo.