El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, manifestó que su país no está entre las naciones que se dedican a la producción de drogas, pero que sin embargo, por su proximidad a Colombia y Perú no se puede evitar que el problema también los involucre. Comentó que lo que deben hacer es tomar las medidas para protegerse de la mejor manera.
«No podemos obviar la realidad. Somos países limítrofes, nuestros dos vecinos son los dos mayores productores de droga de la región y de los mayores del mundo. Por ello, esperar que Ecuador no sea salpicado por el problema de la droga y el crimen organizado es demagogia” explicó.
Estas declaraciones las emitió a raíz de la operación policial que se realizó esta semana en la que se decomisaron 4,16 toneladas de cocaína y se detuvieron a nueve personas tras una requisa a casas y bodegas vinculadas al cártel mexicano de Sinaloa.
Por su parte, el director antinarcóticos de la Policía del Ecuador, Rodrigo Heredia, indicó que el territorio ecuatoriano era antes una zona de tránsito, pero ahora se ha convertido en un país de acopio de la droga.