La reciente gestión que permitiría al distrito ayacuchano de Sivia, en el corazón del valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, contar con una comisaría en el mes de marzo, permitirá el retorno de esta comunidad a la cultura de la legalidad.
Así lo sostuvo en Diálogo Ciudadano, programa de INFOREGIÓN, el analista en temas de seguridad y desarrollo Jaime García, quien añadió que al referido distrito de la provincia de La Mar llegará la presencia del Estado e imperará el estado de derecho a partir de la instalación de la estación policial.
«La presencia de una comisaría va a permitir retornar a una cultura de la legalidad, a la presencia del Estado y también a que impere el estado de derecho que es lo que debe ser», reflexionó García.
Como se recuerda, un grupo de pobladores de Sivia repelió la acción de la fuerza policial el 30 de enero pasado durante un operativo antidrogas, hecho que ha sido atribuido a un sector de la población que mantendría vínculos con el narcotráfico.
Al respecto, sostuvo que «los hechos de hace unos días no han sido extraordinarios, sino que obedecen a una situación en la que lamentablemente el VRAE viene siendo afectado por la presencia del narcotráfico».
Instituciones del Estado deben acompañar labor de la Policía Nacional
En otro momento, el experto recordó que la presencia de la comisaría, a pesar de ser una buena medida, no es suficiente para llevar a la comunidad de Sivia a una vida libre del narcotráfico y de sus actividades conexas como el cultivo de la hoja de coca ilegal, el traslado de insumos químicos y el lavado de activos.
«Creo que el Estado a través de sus otras instituciones como Educación, Salud, Ministerio de la Mujer y programas sociales también tienen que acompañar la presencia de un Estado para recuperar esta zona que lamentablemente se ha visto involucrada con el narcotráfico», comentó.
Explicó, en ese sentido, que la presencia del Estado tiene que ser integral, no solo con actividades productivas y sociales, sino con una estrategia que combine el desarrollo con la lucha contra el narcotráfico, que es la principal tara de la población en esta parte del país.
«Mientras exista narcotráfico en la zona, el ambiente no es propicio para la inversión privada o la inversión pública, inclusive, así como para la extranjera. La principal limitante de desarrollo de esta región es el narcotráfico», estimó.
En ese sentido, dijo que se debe llevar adelante un programa que permita la incautación de los insumos químicos que entran al VRAE destinados al narcotráfico, así como de acciones de interdicción y reducción de cultivos ilegales de hoja de coca.
«Si no hay una reducción de cultivos de hoja de coca, el resto de programas no va a tener resultados», puntualizó.