Una apretada agenda de trabajo sobrevolando las zonas afectadas por las inundaciones y verificando en el mismo lugar junto a las autoridades locales y pobladores, cumplieron ayer el presidente del Consejo de ministros César Villanueva, el gobernador regional Pedro Bogarín y la viceministra del Ambiente Albina Ruiz.
El recorrido se inició muy temprano en la mañana, en el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) donde el premier anunció la entrega de víveres y materiales para atender las emergencias, con una disponibilidad de 12 toneladas de ayuda humanitaria para la región.
Luego de esta acción, vía helicóptero del Ejército Peruano sobrevolaron la zona del Huallaga Central, aterrizando en Nuevo Egipto, San Hilarión y Puerto Rico, para verificar las emergencias que se han producido por las inundaciones del río Huallaga y el trabajo de las maquinarias para rehabilitar las zonas afectadas.
En los lugares indicados en contacto directo con los pobladores, las autoridades comprobaron y recibieron información de los alcaldes y equipos técnicos de Defensa Civil sobre la difícil situación que viene pasando la población, con personas damnificadas, casas inhabitables y afectadas, sembríos, aves y ganados que se han perdido, caminos y carreteras que necesitan atención inmediata.
La comitiva de autoridades coincidió la urgente necesidad de reubicación de algunas poblaciones y la construcción de defensas ribereñas, mientras en el acto se atiende con víveres, materiales, herramientas y maquinaria para rehabilitar los lugares y casas afectadas, en coordinación entre el Gobierno Nacional, gobierno regional y municipalidades.
Asimismo; las autoridades también llegaron a la Zona de Nuevo San Martín en la carretera a Tocache, verificando el estado de la vía y los trabajos de rehabilitación que ya permite el paso de vehículos en forma restringida, se informó a INFOREGIÓN.
Finalmente, Villanueva y su comitiva retornó a Lima y el gobernador Pedro Bogarín, acompañado de autoridades regionales se constituyó al COER, donde hizo entrega en forma simbólica ayuda humanitaria a los alcaldes provinciales y distritales, para ser distribuido en la zona norte, centro y sur de la región, cuyo stock disponible es de 12 toneladas entre víveres, materiales y herramientas.