El presidente Pedro Pablo Kuczynski afirmó que el proceso que sigue tras los huaicos e inundaciones implicará no solo una reconstrucción, sino una construcción mejor que evite situaciones de riesgo posteriores, y estimó su costo en US$9 000 millones.
Detalló que la reconstrucción inmediata demandaría de US$2 000 a US$3 000 millones y las obras para que el país sea moderno y ordenado, cuya ejecución tomaría un tiempo mayor, requerirían de 5,000 a 6,000 millones, lo que haría un total de 9,000 millones de dólares.
Lo primero que se ha hecho en este contexto poshuaicos ha sido la respuesta inmediata con carpas, viviendas transitorias, restablecimiento del servicio de agua potable; al igual que la reapertura de vías como la Panamericana Norte y la carretera Central.
“Después vendrá la rehabilitación, que significa mejores sistemas de agua potable, planeamiento de nuevas zonas de vivienda y luego la reconstrucción”, dijo al remarcar que en vivienda se hará un gran esfuerzo, pues, mucha gente no tiene recursos y se apelará a programas de menor costo.
Asimismo, dijo que el proyecto del tren de cercanías ayudaría a crear nuevas zonas urbanas legales frente al problema de tráfico de tierras, como la detectada en el distrito de Chilca, en Cañete, cuyo alcalde fue intervenido en la víspera, situación que consideró un pecado mortal.
La reconstrucción, insistió, consiste en hacer las cosas mejor que antes y su costo variará dependiendo de cuánta reforma profunda se hará, y comentó que solo el asfaltado en Chiclayo demandaría 800 millones de dólares.
“Los ríos, sus cauces, pasan cerca de zonas agrícolas y ciudades, y deben ser reencauzados y protegidos, hay formas de financiar eso”, añadió.
Según explicó, El Niño costero, fenómeno que no estaba previsto, ha provocado grandes estragos y la lección pasa por tener que prepararse mucho más, ya que este tipo de eventos se repetirán en la era del cambio climático y calentamiento global.