Dos días después que impidieran a viva fuerza la invasión de la defensa ribereña de la parte norte de la ciudad, aludiendo el serio riesgo a la seguridad de toda la población, esta vez los propios moradores del asentamiento humano Keiko Sofía Fujimori, se posesionaron de ese mismo lugar intentando efectuar sus construcciones y poniendo como argumento la defensa de su áreas verdes.
Con esta actitud los pobladores de este asentamiento humano sólo demostraron que su enérgica acción de desalojo del día martes no buscaba evitar una tragedia, sino impedir que otros pobladores se apropien de unos terrenos que consideran suyos, pese al inminente peligro que significa en época de lluvias.
El fiscal provincial, Jeremías Rojas, acudió por segunda vez esta semana hasta el lugar para exhortar a los moradores del asentamiento humano Keiko Sofía Fujimori, a abandonar de inmediato el lugar dado el grave riesgo que implica para su seguridad y los conminó a paralizar las construcciones que han comenzado a realizar en el lugar.
Rojas les recordó que el debilitamiento de la defensa ribereña, por causa de las construcciones que vienen levantando en la zona podía desencadenar una tragedia por acción de las embravecidas aguas del Huallaga, en una época de crecida del caudal por efecto de las lluvias que ya han comenzado a caer en la zona.
Al no obtener respuesta positiva por parte de los moradores del asentamiento humano, el magistrado se retiró del señalando que iniciaría el trámite judicial para el inmediato desalojo y con ello evitar una inminente tragedia.
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