En el local de la División de Operaciones Tácticas Antidrogas (DIOTAD) de la Policía Nacional en Pucallpa se presentaron ante la prensa los 55 kilos de droga incautados el sábado en un operativo realizado en la fronteriza de Brasil.
Junto a los 24 kilos y 500 gramos de clorhidrato de cocaína y los 29 kilos y medio de pasta básica lavada empaquetados en bolsas de polietileno, se mostró una escultura de madera en cuyo interior se estaba acondicionando la droga. También se presentó la escopeta de retrocarga, las municiones, una granada de guerra tipo ‘piña’, y los dos motores fuera de borda hallados en la vivienda rústica de la localidad de Nueva Esperanza, distrito de Masisea.
El fiscal antidrogas, Luis Natividad, advirtió que a partir de este hecho se han efectuado diversas coordinaciones con la Policía Nacional, con el fin de redoblar la vigilancia e incrementar el patrullaje en esa zona, donde una mafia peruano-brasileña parece mantenerse bastante activa. Agregó que en Masisea, cuenca del río Tamaya, también se han descubierto grandes sembríos de hoja de coca, el principal insumo que sirve para la elaboración de cocaína con destino a Europa.