Era cocaína de alta pureza y el laboratorio estaba bien implementado, por eso el golpe que le dieron a los narcotraficantes los agentes especializados del Grupo de Inteligencia Regional (GIR) de Huánuco, debe haberles dolido.
Los policías especializados lograron destruir una laboratorio clandestino bien implementado de fabricación de clorhidrato de cocaína de alta pureza, ubicado en el caserío Sahanantia, perteneciente a la provincia Padre Abad, en la región Ucayali, donde también destruyeron más de una tonelada de insumos químicos que almacenaban los traficantes y decomisaron equipos instalados en el lugar.
Por información confidencial se sabía que la organización de tráfico internacional de drogas conocida como “Los Pavos” se dedicaba a producir clorhidrato de cocaína para transportarlo en embarcaciones con motor fuera de borda hacia la frontera tripartita de Perú, Colombia y Brasil, en el llamado Trapecio Amazónico.
Encabeza esta organización el colombiano John Jairo y la integran los peruanos “Copa”, “Carlos”, “Cambio”, “Pandisho”, “Angélica” o “Triple A” y otros sujetos.
Los agentes fueron desplegados hasta el distrito San Alejandro e iniciaron la operación a medianoche, cuando la patrulla ingresó al caserío Llanta Blanca para emprender una caminata de aproximadamente cuatro horas y llegar a Shanantia, ubicando la instalación clandestina de los traficantes, equipada con grupo electrógeno, horno microonda, gata hidráulica, prensa, alambique, ollas, cocina a gas y otros utensilios.
Asimismo, se hallaron 100 kilos de permanganato, 200 de ácido clorhídrico, 500 de acetona, 100 de soda cáustica, 100 de bicarbonato de sodio y 100 de alcohol, todos ellos insumos químicos empleados en el procesamiento de la droga.