Los importantes logros alcanzados durante este año en la erradicación de hoja de coca ilegal en las regiones de San Martín, Huanuco y Ucayali, en donde se eliminó más de 11 mil hectáreas de coca ilegal; se debieron básicamente a un coordinado trabajo en equipo en el que jugó un decisivo papel la policía antidrogas y de la aviación policial.
Desde febrero de este año, hasta el pasado 7 de diciembre en que concluyeron las tareas programadas de reducción del espacio cocalero, las jornadas diarias de erradicación significaron la movilización de un promedio de 300 personas entre trabajadores civiles encargados de las labores manuales, policías antidrogas a cargo de la seguridad con el apoyo de soldados del ejército y efectivos de la aviación policial responsables de las operaciones helitransportadas.
Las zonas de erradicación se caracterizan por la permanente presencia del narcotráfico en alianza con remanentes de sendero luminoso y de agricultores cocaleros, empeñados todos en la suspensión de las labores de eliminación de la coca ilegal que va al narcotráfico, por lo que se requiere todo un trabajo coordinado y profesional para garantizar la seguridad del personal encargado de realizar las labores de erradicación de cultivos de coca ilegal.
En esa tarea, la policía antidrogas cumple un papel decisivo. Sin la protección y seguridad que brindan sus efectivos, no hubiera sido posible alcanzar los logros que hoy aplaudimos.
Campos que matan
En ese marco de trabajo conjunto, cumplieron también un decisivo papel el equipo de perros antidrogas, entrenados especialmente para la detección de artefactos explosivos como minas artesanales y cazabobos, colocados arteramente para evitar las acciones de erradicación.
Durante el presente año, 75 trampas explosivas fueron instaladas en medio de las parcelas de cultivos ilegales de coca no empadronados por ENACO, ocasionando la muerte de un trabajador del Corah, así como de un poblador civil y dejando heridos a 18 erradicadores, 13 policías antidrogas y un niño, trasladados todos de inmediato por el helicóptero de la aviación policial.
El resultado del trabajo conjunto ha sido un significativo avance en la lucha contra el narcotráfico en nuestro país.
No sólo se logró superar la meta anual de erradicación de coca programada para este año, sino que con ello se logró evitar la producción de 264 toneladas pasta básica de cocaína y de 88 toneladas de clorhidrato de cocaína, que las mafias del narcotráfico, pensaban comercializar en el mercado internacional y obtener ganancias del orden de los 1,329 millones de dólares.