Una exitosa incursión policial en el corazón del valle del Monzón permitió la incineración de más de dos toneladas de hoja de coca lista para su procesamiento. Se intervino también dos laboratorios clandestinos y una tonelada de insumos químicos.
El Departamento de Operaciones Especiales Antidrogas (DEPOTAD) de Tingo María y el fiscal Gino Huerto Bravo hallaron un depósito con 40 sacos de polietileno que contenían hoja de coca seca. Además, encontraron una motobomba que se utilizaba para arrojar los residuos contaminantes en el río.
La finalidad del operativo policial era llegar hasta las instalaciones clandestinas del traficante de drogas conocido como “Barriguita”. Por informaciones de inteligencia, las últimas actividades del sujeto fueron detectadas en esta zona.
El coronel Alexis Bahamonde Chumpitaz, jefe de la División de Operaciones Especiales Antidrogas (DIVOEAD) Huallaga, señaló que la operación se realizó en una zona de narcotraficantes y elementos remanentes de Sendero Luminoso.
Reveló que en este sector la coca se comercializa al precio de US$ 50 por arroba.
Cabe indicar que las instalaciones del narcotráfico fueron destruidas de inmediato por disposición del representante del Ministerio Público.
De igual forma se eliminaron los insumos químicos como ácido sulfúrico, kerosene y una mezcla de gasolina con petróleo.
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