Un grupo de aproximadamente cien hostiles pobladores del caserío Nueva Victoria, en el distrito Santa Rosa, provincia La Mar, Ayacucho, intentaron impedir que efectivos policiales antidrogas destruyan cinco laboratorios rústicos de fabricación de cocaína.
En su intento atacaron a la policía desde los cerros, provistos de armas de fuego y hondas. La policía tuvo que hacer uso de gases lacrimógenos para dispersarlos y cumplir la misión.
Luego de contrastar información de inteligencia, efectivos del Grupo de Operaciones Antidrogas Tácticas en Jungla (GOATJ), unidad élite de la Dirandro, intervinieron en la localidad de Nueva Victoria, en donde se había detectado la existencia de cinco laboratorios clandestinos de fabricación de cocaína, informó la policía a INFOREGIÓN.
Al llegar al lugar, acompañados por el fiscal antidrogas de Palmapampa, Julio Rosas Castañeda, los agentes hallaron las instalaciones clandestinas ubicadas a cierta distancia una de otra y acondicionadas para procesar 200 arrobas de coca cada una.
Con el uso de explosivos de poder controlado iniciaron la destrucción de los laboratorios, así como un total de 2 toneladas con 485 kilos de insumos químicos, entre ácido sulfúrico, gasolina, ácido muriático, hidróxido de calcio y 408 kilos de cloruro de sodio (sal yodada).
Cuando los agentes se disponían a destruir el quinto laboratorio, en el cerro contiguo apareció un grupo de personas con actitud hostil que iniciaron un hostigamiento al personal policial, lanzándole piedras con hondas y efectuando disparos indirectos con escopetas calibre 12.
Los efectivos policiales tuvieron que refugiarse por unos momentos en la vegetación para luego repeler la acción con el uso de gases lacrimógenos, lo que finalmente logró dispersar a la turba. Con esta operación se calcula que fue frustrada la producción de al menos 75 kilos de pasta básica de cocaína.