Desde hace algunas semanas, los moradores del caserío Puerto Perú, en el valle del Shanusi, a pocos kilómetros del centro de operaciones de la Empresa Agropecuaria del Shanusi, del Grupo Romero, comprobaron un cambio repentino en la coloración y volumen de agua de la quebrada Yanayacu fuente de alimentación de la población.
Incluso, las autoridades y moradores de Puerto Perú no descartaron responsabilizar a la empresa del Grupo Romero por la anormalidad de las aguas. Según detalla el diario Voces, de Yurimaguas, el lunes 18 los moradores denunciaron en la emisora Doble A que la referida quebrada presentaba una coloración distinta con residuos de sustancias químicas.
Esta denuncia alertó a las autoridades de Salud y de la municipalidad, quienes ayer organizaron una intervención que contó con la participación del alcalde Héctor Hidalgo; el director de la Red de Salud, Martín Beltrán; el jefe de Salud Ambiental de la Red de Salud, Fernando Fernández; y funcionarios de la Gerencia Sub Regional de Alto Amazonas.
Esta comisión multisectorial llegó por carretera hasta Puerto Perú y corroboró la denuncia de los moradores. Fernando Fernández informó a Voces que la quebrada presenta una turbiedad por encima de los limites permisibles de 2,500 UMT (Unidades Mécelo Métricas), además de sólidos y partículas en suspensión en altas cantidades.
Agregó que el agua no es apta para consumo humano, pues la falta de luminosidad y disponibilidad de oxígeno ha eliminado la vida de peces y otros seres vivos. Sin embargo, atribuyó el fenómeno a la sequía existente por falta de lluvias y a trabajos de encauzamientos, drenes, terrapleno y otras actividades de la empresa Agropecuaria del Shanusi en aguas arriba de la zona de concesión.
Luego de comprobar el grado de contaminación de la quebrada, las autoridades se trasladaron a las oficinas administrativas de la empresa Shanusi, en Pampa Hermosa. En el lugar dialogaron con el gerente general Héctor Dongo, quien no permitió el ingreso de la prensa.
Fernández informó que el representante del Grupo Romero aceptó que su empresa realiza trabajos de encauzamiento, drenes y otros, comprometiéndose a paralizar las operaciones, para apoyar a las autoridades a mitigar los daños que la contaminación está causando, como casos de diarreas y enfermedades de la piel en la población, situación por la que también está atravesando la comunidad de Cotoyacu.
En tanto, la municipalidad de Yurimaguas trasladará a Puerto Perú una cisterna cargada de agua potable, y la empresa habilitará pozos artesanales para extraer agua. Entre tanto la Red de Salud, se ha comprometido a realizar una campaña médica en el lugar para atender los casos citados.