Los tocachinos se encuentran entre preocupados y desconcertados por el futuro desempeño de las autoridades ediles recientemente nombradas por el alcalde David Bazán Arévalo.
Los cuestionamientos de la población sobre lo equivocado de estas designaciones se relacionan con el nuevo coordinador de Defensa Civil, Jorge Ramírez Lozano, cuyos conocidos antecedentes penales por delito de narcotráfico generan mucha inquietud.
Por su parte, el alcalde hace oídos sordos ante este malestar, y acaba de nombrar a su primo, Víctor Lureña Venterilla, como gerente de la Empresa de Agua Potable Tocache.
Se trata de otro personaje con oscuros antecedentes, vinculado a la desaparición de 20 mil nuevos soles y algunos muebles cuando era gerente de Electro Tocache, durante la pasada administración de Tadeo Rengifo. «Todos tienen derecho a una segunda oportunidad», ha dicho el burgomaestre, como una tímida respuesta a tanto reclamo.