Angustiado y muy preocupado se encuentra Antonio Bautista, padre de las menores Estefani Quispe Garay y María Dolores Bautista Quispe, de 11 y 9 años respectivamente, que desaparecieron el 30 de diciembre del 2007 en circunstancias que no han sido aclaradas hasta el momento. ¿La razón? Miembros policiales del VRAE señalaron a los familiares que no podían avanzar en las investigaciones por falta de una unidad de criminalística.
«Me han dicho que la policía de nuestra zona no puede ver ese tipo de casos porque falta una policía especializada en criminalística. Yo reclamo que esa unidad se instale en el VRAE para que busquen a mis hijas. Nadie sabe de su paradero. Ellas regresaban de la chacra en el sector de la Unión y hasta ahora no regresan», manifestó el padre de las desaparecidas.
Asimismo, el atribulado padre de familia hizo un llamado a las autoridades municipales para que puedan darle un pequeño presupuesto que le permita viajar a Ayacucho y a Lima para poner en conocimiento la desaparición de sus menores hijas.
Meses atrás, diversos pobladores que sufrieron dramas similares, solicitaron que el Frente Policial VRAE instale una unidad de criminalística debido a los constantes hechos delincuenciales ocurridos en la zona y que muchas veces quedan sin ser aclarados