Piden a dirigencia nativa pronunciarse por crecimiento de cultivos de coca en áreas reservadas

Los dirigentes de la Federación Nativa del río Madre de Dios y Afluentes (FENAMAD) deberían pronunciarse e invocar una acción inmediata de las autoridades, ante la seria amenaza que se cierne sobre la ecología en dicha región a causa del accionar del narcotráfico y los taladores ilegales.

“La presencia de cultivos ilícitos de hoja de coca dentro de Madre de Dios es un hecho absolutamente verificable, que se está incrementando sin que las organizaciones nativas, como la FENAMAD, que dice defender los derechos de las comunidades, hagan algo para enfrentarlo”, indicó Rubén Vargas, experto en temas de narcotráfico y seguridad.

Tolerancia cero frente a cultivos ilegales

A través del programa Diálogo Ciudadano, que se emite por las ondas de Radio Aurora de Puerto Maldonado, en coproducción con INFOREGION, Vargas Céspedes pidió a los pobladores de Madre de Dios tener una tolerancia cero frente a los cultivos ilícitos de hoja de coca, y proceder a erradicarlos sin ningún tipo de diálogo o negociaciones, pues amenazan terriblemente a la rica biodiversidad amazónica.

“Nadie podrá afirmar ahora que esos cultivos son para fines tradicionales en Madre de Dios. Todo lo que se cultiva allí es absolutamente ilegal y va para el narcotráfico. Además, está afectando a las áreas protegidas y a las zonas de amortiguamiento”, alertó.

Corredor internacional de la droga

Por otro lado, el analista advirtió que las organizaciones criminales de la droga han incrementado su presencia en la zona y utilizan esta región como un  gran corredor internacional para sacar las drogas cocaínicas hacia Brasil y Bolivia, vía la recientemente asfaltada carretera Interoceánica.

Vargas explicó que la mayor parte de la cocaína intervenida en esa ruta procede de la zona de San Gabán, en Puno, así como de las regiones cocaleras ubicadas en el valle de los ríos  Apurímac y Ene (VRAE).

«Urge que las autoridades tomen acciones concretas, pues hay escasa presencia y control policial en la carretera, lo que viene siendo aprovechado por las organizaciones criminales que han convertido a Madre de Dios en un punto estratégico para el tráfico a través de las rutas terrestres y fluviales», sentenció.