Con el fin mejorar la calidad de vida de los peruanos, Carmen Masías, presidenta ejecutiva de Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), firmó un Memorándum de Entendimiento que permitirá atender las demandas ciudadanas de servicios básicos (educación, agua, transporte, caminos rurales) en las zonas donde se cultivaba la hoja de coca.
En esta alianza estratégica participaron el Ministro de Economía y Finanzas, David Tuesta; el Embajador de los Estados Unidos en el Perú, Krishna R. Urs y el Administrador de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), Mark Green. Se trata de una asociación público-privada para el desarrollo local y económico de las familias peruanas que antes promovían el cultivo ilegal y que ahora, muchas de ellas se dedican a la producción de café y cacao.
A la firma de este importante compromiso asistió el Presidente del Consejo de Ministros, César Villanueva, quien dijo tener el honor de ser parte de esta lucha contra las drogas. A su vez, destacó que “el aroma del café puede vencer al nauseabundo olor de la cocaína”.
Durante su alocución, Masías precisó que actualmente existen dos amenazas en el país: la corrupción y el narcotráfico. No obstante, aclaró que hay esperanza de mejorar. “Haciendo las cosas de manera coordinada, vamos a lograr un Perú sin drogas para nuestros hijos y nietos”, finalizó.
Familias beneficiarias y testimonios
Con el acuerdo, Devida busca llegar a beneficiar a familias de 12 distritos de Ucayali, San Martín, Pasco, Huánuco y Junín. Aquí se realizan actividades post-erradicación y necesitan asistencia técnica. Por su parte, el Ministerio de Economía y Finanzas estimó que se necesitará un aproximado de US$ 617 millones para reducir las brechas sociales y económicas en transporte, educación, salud y otros sectores básicos en estas áreas rurales.
El evento también contó con la participación de Elías Fausto y su esposa Hermelinda, exproductores de hoja de coca. “Nosotros teníamos trabajo, pero no futuro. Ahora como productores de café, me siento orgulloso, vivo feliz y tranquilo con mi familia”, dijo Fausto, quien es un beneficiario de la Alianza Café, implementado por Technoserve.
Otro testimonio que muestra que con el Desarrollo Alternativo se logra una mejor calidad de vida, es la de Paquita García de Ruiz. Ella es madre de 4 hijas y abuela de seis pequeños. Hace cinco años se dedica a la producción de cacao y una de sus hijas es su socia gracias a las capacitaciones de Cedro.