La prensa local que se desarrolla en las zonas de influencia minera desconoce, por lo general, los alcances de los proyectos mineros y se encuentra atrapada de antemano en la dicotomía de ser pro o anti minero, situación que ocasiona prejuicios, falta de diálogo y no contribuye a la solución de los conflictos, explicó el periodista de investigación del diario La República, Edmundo Cruz, en el Foro «Periodismo y Conflictos Mineros», organizado por la Universidad Católica.
Cruz lamentó que esta situación se lleve a cabo en un marco de incremento de los conflictos mineros que, según la Defensoría del Pueblo, alcanzaron los 30 casos entre enero y junio de este año, frente a los 33 registrados en todo el año 2005, y aseguró que la posición de la prensa regional
Indicó que tanto la prensa regional que apoya la inversión minera como la que se opone radicalmente a ella se han declarado la guerra de antemano, defendiendo cada una sus intereses y posiciones, ocasionando con ello que permanezcan cerrados todos los espacios de diálogo en lugar de fomentar una mejor comunicación y debates con ideas y argumentos que contribuyan a una mejor toma de decisiones.
Puso como ejemplo el reciente conflicto suscitado alrededor de la minera Majaz en Piura, en donde los periodistas de la zona tomaron a priori partido por una de las dos posiciones, generando líneas editoriales pre establecidas, información sesgada, insuficiente, desinformación, pérdida de la credibilidad y, peor aún, contribuyeron a una mayor tensión en la zona.
Cruz lamentó que sea una constante en todas las zonas mineras un ejercicio periodístico prejuicioso, sin constatación de fuentes ni conocimiento sobre la actividad minera en su aspecto productivo, económico y social, privilegiando un tratamiento sensacionalista de la información con evidentes conflictos éticos, por lo que formuló un llamado a los hombres de prensa a especializarse y reforzar tanto su formación profesional como sus valores éticos.