Periodista amenazado de muerte en Puerto Maldonado solicitó garantías personales

En la provincia de Tambopata, departamento de Madre de Dios, el periodista Manuel Calloquispe Flores, director del programa “La Cara del Pueblo”, que transmite Americana TV, y también colaborador de INFOREGIÓN solicitó garantías personales en la gobernación de esa provincia, tras ser amenazado de muerte mediante llamadas telefónicas.

El pedido de garantías tiene fecha de recepción del Ministerio del Interior el 25 de febrero de 2013. En el documento se sindica como agresor al empresario minero Lino Aquino Tito y se adjunta como medio de prueba un CD conteniendo el audio que corresponde a la llamada que éste último le hiciera al periodista el reciente 12 de enero.

Asimismo, el comunicador social tiene en su poder grabaciones de llamadas telefónicas recibidas donde una voz de sexo masculino no identificada le dice: “vas a morir”.

El periodista, semanas antes de las amenazas, había denunciado el impacto negativo de la minería ilegal en la localidad de Aguas Negras, donde Aquino Tito fue favorecido por la Dirección Regional Forestal y Fauna Silvestre del Gobierno Regional de Madre de Dios, con una concesión para el manejo y aprovechamiento del aguaje, fruta tropical de la zona.

El reportaje periodístico revela que el empresario minero en lugar de cumplir con el propósito de la concesión, se estaría dedicando a la minería ilegal.

Esta sería la razón del amedrentamiento y amenazas en su contra. El periodista, no es la primera vez que recibe amenazas de parte del empresario, según denuncia. En el 2012  fue hostigado por haber publicado un reportaje donde un grupo de comuneros de Aguas Negras denunciaban el daño que les produce la minería ilegal.

El periodista, fue informado, asimismo, que el empresario habría ofrecido dinero para que lo golpeen.

Las amenazas obligaron al periodista a salir del lugar y poner a buen recaudo a miembros de su familia por el temor a que les pase algo.

En comunicación con la Oficina de los Derechos Humanos de la ANP manifestó su decisión de retornar y denunciar los hechos, pues su labor de informar prima ante el miedo o la posibilidad de autocensurarse.