Paso importante para detener la destrucción de la casa de todos

LIMA. Ayer miércoles 7 de abril se aprobó en la Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso de la República el predictamen del Proyecto de Ley Contra el Tráfico Ilegal de Flora y Fauna Silvestre que propone modificar la Ley de Crimen Organizado, Ley 30077, y categorizar como crimen organizado a los delitos relacionados al tráfico ilegal de flora y fauna silvestre en el Perú. Se espera sea llevado a votación en el pleno del Congreso de la República y este se apruebe. Willy Reaño, director del Grupo Viajeros, opina lo siguiente:

Gran trabajo el del congresista Alberto de Belaunde y de los colectivos e instituciones sociales que lo han acompañado en los últimos meses en la campaña ciudadana para sacar adelante el proyecto legislativo que incorpora el tráfico de flora y fauna silvestre a la Ley Contra el Crimen Organizado. Aunque el mencionado proyecto debe ser aprobado por el Congreso de la República lo avanzado hasta ahora constituye un paso importante en la impostergable tarea de detener la destrucción de la casa de todos: el tráfico de tráfico de especies de fauna silvestre, lo vuelve a mencionar WCS Perú en la nota que comparto con usted, solo en el 2019 más de 6200 animales vivos de origen ilegal fueron recuperados por las autoridades en 17 departamentos del país.

Según la WCS, entre el 2010 y 2018, más de 50 mil animales vivos fueron decomisados. (Foto: Musuk Nolte)

El tráfico de especies silvestres es uno de los problemas más graves que afrontamos como sociedad. Todos los días somos testigos de los ilícitos penales alrededor de esta deleznable actividad. Hace unos días Renzo Piana, director ejecutivo de Conservación del Oso de Anteojos-SBC, me comentó el daño que le siguen haciendo a los bosques secos del norte las mafias que siguen convirtiendo los añosos y muy amenazados árboles de algarrobos en carbón para las pollerías que tanto festejamos. Y es, lamentablemente, un ejemplo más de los miles que tenemos para contar.

Es imprescindible que cerrar filas en defensa de nuestra riqueza natural: lo que nos queda, que no es poco, nos va a ser de utilidad para sanar la tierra. La restauración ambiental, el rewilding, no la ominosa destrucción de nuestros activos naturales, es el afán que debe convocarnos. Cerremos filas detrás de este paso que se ha dado en el congreso y sigamos expectantes a la culminación de tan noble proceso. Sí se puede, #otromundoesposible