Apenas tiene un año de reinaugurado y ya luce abandonado. El parque Ramón Castilla, ubicado a la entrada de la ciudad tingalesa, y que fuera una hermosa muestra de la iniciativa de esta ciudad a favor del turismo, hoy se encuentra en total abandono y en estado deplorable.
La remodelación de este parque costó más de 400 mil soles, incluyendo la instalación de modernas piletas, iluminación especial, jardines bien cuidados y bancas debidamente acondicionadas para el descanso y la contemplación.
Pero ahora el guardián y el jardinero brillan por su ausencia, se observan asientos deteriorados, la pileta ofrece al visitante sus aguas verdosas y las hasta hace poco hermosas lámparas ahora se encuentran semi destruidas. Los vecinos reclaman mayor atención, pues la zona corre peligro de convertirse en antro de la prostitución y las drogas.