AMAZONÍA. La conservación y gestión ambiental de los espacios naturales en nuestro país constituyen un imperativo para combatir los efectos del cambio climático, como parte de las soluciones basadas en la naturaleza. La Amazonía es un escenario vasto en el que se han desarrollado iniciativas en ese sentido. Este es el caso del Parque Nacional Cordillera Azul (PNCAZ) que ha cumplido 20 años de su creación. Este se halla ubicado entre las regiones de Huánuco, Ucayali, San Martín y Loreto. A lo largo de estas dos décadas, su ejemplo de gobernanza permitió que sea reconocido como un modelo mundial a seguir gracias a la gestión mancomunada que reunió al Estado, diversas entidades y a las comunidades nativas.
Un objetivo clave en la creación del PNCAZ es el de contribuir al desarrollo de un manejo integrado y equilibrado de los recursos naturales de las zonas adyacentes. Por ello, su gestión busca mejorar la calidad de vida, mantener los servicios ecosistémicos que brinda, como es la regulación del clima de la zona, ser fuente de agua y otros beneficios hacia poblaciones vecinas de la zona de amortiguamiento. El parque fue establecido en el 2001. Posee 1 353 190.85 hectáreas. Su zona de amortiguamiento cubre 2.3 millones de hectáreas que albergan más de 500 centros poblados y comunidades nativas, siendo alrededor de 120 las más cercanas al parque. En 20 años de labores el PNCAZ destaca por varias herramientas implementadas a favor del ambiente y el desarrollo sostenible que vale la pena detallar. Veamos.
Se usan estrategias de gestión participativa pioneras en el ámbito de gestión nacional y mundial de las Áreas Naturales Protegidas (ANP). Se emplean herramientas como el mapeo de usos y fortalezas de las comunidades o poblados vecinos, planes de calidad de vida de los mismos, implementación del contrato de administración más grande del Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sinanpe) y un proyecto REDD+, etc. En su modelo de gestión participativa intervienen el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado
(Sernanp) como titular del Estado y CIMA como ejecutor de Contrato de administración, además de contar con una plataforma de participación (Comité de gestión) con representantes de unas 118 instituciones y organizaciones de la zona de amortiguamiento y otros ámbitos estratégicos de la zona de amortiguamiento del parque.
Impulsando la participación ciudadana: El Comité de Gestión
Este comité es un espacio que impulsa la participación ciudadana con actores que solicitan su incorporación, siendo de corte voluntario y propositivo. En tiempos de pandemia, el comité, ha realizado encuentros virtuales para divulgar actividades y hacer rendición de cuentas.
Integran este comité las comunidades nativas Santa Rosillo, Chambira, Mushuck Llacta, Siambal, Callanayacu (del pueblo Kichwa), Yamino (pueblo Cacataibo), Santa Rosa (pueblo Shipibo), Túpac Amaru, Tres Unidos, Manco Cápac, Iscolaya (pueblo Shipibo – Conibo), etc. Cabe añadir que el 25 de noviembre del 2021 el Apu Alpino Fasabi Tuanama, de la CN Puerto Franco, solicitó a la presidenta del comité, Deysi Mendoza, integrar este espacio de participación señalandose como titular y como alterno a Pedro Fasabi Isuiza.
Inclusión en la Lista Verde de la UICN
El parque fue reconocido en la Lista Verde de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) en el 2018 durante la COP 14. Allí se destacó la gestión del ANP basada en la alianza entre el Estado con la ONG CIMA-Cordillera Azul, ejecutor del contrato de administración y su plataforma de participación (Comité de gestión). Con la inclusión del PNCAZ en la Lista Verde se reconoció a nivel mundial el buen estado de conservación y óptima gestión del ANP como aporte al desarrollo sostenible.
Desarrollo del proyecto REDD+
En el 2007, CIMA trabajó de manera conjunta con su asesor técnico de entonces, The Field Museum of Chicago, buscando la sostenibilidad financiera del PNCAZ. Como resultado de ello desarrollaron el Proyecto REDD+ para el PNCAZ, que se registró ante el Estándar Verificado de Carbono (VCS) de VERRA 1.
El área del proyecto REDD+ del PNCAZ cubre 1 351 964 hectáreas del parque. Su implementación busca evitar la deforestación y fortalecer su gestión, involucrando a la población local y otros actores interesados en el uso del territorio y el desarrollo de actividades compatibles con la conservación, y mejorando la calidad de vida de la población vecina del parque en la zona de amortiguamiento. Según reportes del Sernanp, se tiene un 99.6 % de estado de conservación.
Los recursos que se obtienen para el Parque son utilizados en su totalidad para asegurar su conservación y desarrollar oportunidades para las comunidades ubicadas en su zona de amortiguamiento basadas en actividades económicas sostenibles.