La búsqueda del zorro andino «Run Run» en el distrito limeño de Comas, que fuera vendido a un menor de edad, ha renovado la reflexión acerca de las nefastas consecuencias que genera el tráfico ilegal de animales silvestres a nivel mundial. Es sabido que la envergadura de dicha actividad ilícita va detrás del narcotráfico y del tráfico de armas. Al respecto, el veterinario y activista ambiental Pancho Cavero alertó sobre la urgencia de combatir y acabar con este flagelo.
Cavero alertó que la acción de instalar un animal silvestre en casa, luego de comprarlo a estas mafias, conlleva el riesgo de adquirir enfermedades que pueden ser transmitidas hacia los miembros de una familia. Recordó que animales como los monos, los guacamayos, las tortugas, entre otros, son portadores de parásitos a los que el cuerpo de las personas no están preparados. «Los animales silvestres no son mascotas», resaltó.
El veterinario advirtió que nuestro país no debe tolerar la existencia de mercados en donde se comercialicen animales silvestres. Al respecto, citó el caso del mercado en Belén, en la ciudad de Iquitos, en donde se comercializa carne de animales silvestres, a pesar de su prohibición. También abogó por que desaparezca la venta de animales silvestres en una ciudad como Lima para que no se repitan casos como el del zorro Run Run.
Recordó que la comercialización descuidada de animales en mercados como el de Wuhan, en China, estuvo en el orígen de la actual pandemia que ha causado millones de muertos en el mundo. Advirtió a quienes desean un mono en sus casas que estos mueren de tuberculosis, que puede ser transmitido a los humanos; además, los loros generan hongos. Sostuvo que «esto es a nivel micro lo que se ha padecido con la pandemia» a nivel mundial.
Lamentó que esta mafia siga vigente por la demanda de personas que desean tener animales silvestres como mascotas. Hizo un llamado a no ser cómplices de esta mafia, a quienes la salud no le interesa. «A esa gente no le importa, ni la vida, ni nada, van por unos S/100». Muchos animales son vendidos con enfermedades; al respecto citó el caso de los perrros: luego de pocos días de comprados mueren de parvovirus, distemper, «y uno reclama, te dicen que es tu culpa. Y la familia sufre con la muerte del animal»
Respecto al caso de Run Run, expresó su deseo en que una vez hallado sea acogido en el Zoologico de Huachipa, el Parque de las Leyendas u otro centro de rescate autorizado. El animalito no debe quedar libre pues generaría problemas de zoonosis; además no podría volver a su hábitat ya que no sobreviviría por el tiempo pasado en la ciudad, dijo en declaraciones para ATV Noticias.
Más datos
- El paradero de Run Run es monitoreado por especialistas de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre (ATFFS) Lima del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor). Ayer, en el cuarto día de seguimiento, el animal fue ubicado durmiendo, sin embargo, su captura se frustró debido a que fue perturbado, razón por la que escapó. Se sabe que su captura no es fácil por la conducta escurridiza del animal, por lo que se hizo un llamado a la población para no molestarlo.
- El comercio ilegal de fauna silvestre es agudo en países como el Perú debido a que nuestra rica biodiversidad nos convierte en punto clave para esta mafia. Más de 300 especies de animales silvestres del Perú son objeto de tráfico ilegal y cerca de 50 de ellas están en alguna categoría de amenaza de extinción. A nivel mundial, el tráfico ilegal de la fauna silvestre es uno de los comercios ilegales más lucrativos y genera entre US$ 7800 y 10 000 millones por año, según la Estrategia Nacional para Reducir el Tráfico Ilegal de Fauna Silvestre 2017-2027.