Palma aceitera es alternativa rentable a la hoja de coca ilegal

Por más contradictorio que suene, la selva peruana ha sido centro de apogeos impresionantes en la explotación de recursos naturales, pero de manera desmedida (caucho) y hasta ilegal (hoja de coca), que no terminaron generando desarrollo en esa región del país.

Sin embargo, de un tiempo a esta parte, principalmente en la última década, el café y el cacao le dieron un rumbo distinto a la economía amazónica.

Pero también está la palma aceitera, que actualmente abarca 60 mil hectáreas en producción en el Perú, de las cuales el 90% se concentra en San Martín y Ucayali, y el 10% en Loreto y Huánuco.

Además, según el Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), en la selva peruana existen 600 mil hectáreas con potencial para cultivar palma aceitera.

Algo importante es que el 60% del área cultivada de palma aceitera pertenece a medianos y pequeños agricultores, generando una buena oportunidad de desarrollo para las poblaciones de la Amazonía nacional.

Un ejemplo de lo exitoso que viene siendo esta actividad lo demuestra la Asociación Agropecuaria «Nuevo Amanecer» de Huánuco, que el viernes pasado inauguró su planta extractora de aceite de crudo de palma aceitera.

«Somos cerca de 100 socios que tenemos palma aceitera en nuestros terrenos, porque apostamos por este cultivo, en vez de ir a lo más fácil, que es el cultivo de hoja de coca», dice doña Gladys Díaz, presidenta de la Asociación «Nuevo Amanecer».

El ministro de Agricultura y Riego, Milton von Hesse, destacó que cuando un agricultor se enrumba a una economía lícita y deja el cultivo de hoja de coca el gobierno debe poner el doble de su esfuerzo para apoyar estas iniciativas.

«La liquidez que da la hoja de coca no brinda bienestar, por eso es mejor cambiar a una alternativa que trae progreso y tranquilidad a las familias», sostiene von Hesse.

Y es que la palma aceitera es uno de los cultivos más rentables, ya que el palmicultor cosecha de 2 a 3 veces por mes.

Por eso «Nuevo Amanecer», con el apoyo del Programa de Compensaciones para la Competitividad (Agroideas) del Ministerio de Agricultura y Riego, invirtió S/. 2 millones para que se concrete la planta que procesará los frutos de la palma en su misma localidad, en beneficio de los productores de los distritos de Hono-ria (Puerto Inca, Huánuco) y Campoverde (Coronel Portillo, Ucayali).

«El impacto social del proyecto no solo dinamizará el sector palmicultor en la zona, sino la economía local, permitiendo la generación de empleo directo e indirecto, lo que elevará los ingresos de los pobladores», señaló Marco Vinelli, jefe de Agroideas.

PRODUCCIÓN Y MERCADO

La producción de palma aceitera fue declarada de interés nacional por el Estado peruano en el 2000, generando mayor interés en las grandes inversiones.

El Grupo Romero (a través de Palmas del Espino y Palmas del Shanushi) maneja 22.000 hectáreas en producción, además tienen 4 proyectos en proceso de evaluación que abarcan 35.000 hectáreas en Loreto. Aunque la empresa va más allá y ha declarado que para el 2021 proyecta tener 120.000 hectáreas de palma aceitera.

Asimismo, el gobierno regional de Loreto dice tener solicitudes de diversas empresas para la adjudicación de más de 106.213 hectáreas para plantaciones de palma aceitera.

Es un cultivo con buen futuro, pues en el 2012 la producción de palma aceitera se estimó en 544 mil toneladas métricas, mostrando un incremento anual de 40%.

Sin embargo, los pequeños productores todavía presentan bajos rendimientos de 9 a 12 toneladas de RFF (Racimo de Fruto Fresco), si lo comparamos con el promedio de Palmas del Espino de 20 a 25 toneladas.

Marco Vinelli sostiene que el problema de esta actividad agrícola radica en el difícil acceso a tecnología de mediana escala para desarrollar un adecuado procesamiento de su producto, por eso es importante la asociatividad de los productores.

Otra dificultad era que los productores estaban obligados a trasladar su producción a las principales plantas de procesamiento y extracción en Ucayali, como OLAMSA. Esto trajo como consecuencia el encarecimiento de los fletes (S/. 260/1.5 TM de fruta), restando competitividad a los palmicultores.

En cuanto al mercado, Perú es un país importador neto de aceite de palma, pero desde el 2012 las compras de aceite en bruto se redujeron en 99,88% y las compras de aceite refinado se han estancado en US$ 25,5 millones.

En el caso del biodiesel, tenemos capacidad instalada para la producción de biodiesel que puede cubrir la demanda nacional de mezcla de 5% (La República).