Opinan que exoneración beneficia a narcotraficantes y contrabandistas

Las exoneraciones del Impuesto Selectivo al Consumo, ISC, de los combustibles que goza la región Ucayali, ocasionan serios perjuicios a la población, beneficiando únicamente a quienes se dedican a la producción de drogas, el contrabando y al comercio ilegal de un sector de griferos.


Para el contador José Palomino Ochoa, estas exoneraciones deben eliminarse, pues los montos que los supuestos beneficiarios dejan de pagar se trasladan a la canasta básica familiar.


Asimismo, la eliminación de tales beneficios podría compensar el precio del combustible tras la reducción de los subsidios realizados por el gobierno nacional.


Palomino Ochoa precisó que no tiene sentido mantener libre de impuestos al kerosene, porque beneficia directamente a los narcotraficantes y no a los más pobres.


«Los pobres usan más leña que kerosene, pero el gobierno defiende las exoneraciones sin percatarse que está alentando la elaboración de drogas» indicó.


Por ello, el profesional estimó que se deben eliminar las exoneraciones del ISC al combustible, así como se redujeron los subsidios. «Éste es el mecanismo más acertado para combatir el alza de precios de los pasajes y de los alimentos», agregó.


Otro sustento para eliminar las exoneraciones del ISC al combustible consiste en que al reducirlas -al menos a la mitad en un año- el precio de venta podría reducirse notoriamente.


Aseguró que al eliminar tales beneficios la gasolina bajaría en S/1.85 y si se reducen en 50% en un año, los precios bajarían S/0.80 comparándolo con la actualidad.


Sin embargo estimó que el gobierno no se anima a eliminarlos, porque es una fuente de recaudación tributaria. «Las exoneraciones deben eliminarse cuanto antes. La salida es reducir las exoneraciones por la mitad para estabilizar los precios tras la reducción de subsidios».


Recordó que las exoneraciones del ISC al combustible también alcanzan al kerosene y lamentó que su vigencia no haya sido utilizado por el gobierno regional y las municipalidades locales para mejorar el sistema vial de la ciudad, llena de calles sin pavimentar y con enormes baches en las pistas que repercuten en el mal estado del parque automotor.