El ministro del Ambiente, Antonio Brack, consideró que el corte del ingreso de ingentes cantidades de kerosene al valle del río Apurímac y Ene (VRAE) será un golpe al narcotráfico que usa ese y otros insumos químicos para la elaboración de estupefacientes. De este modo, respaldó la iniciativa de reducir los envíos de kerosene a esta zona del país.
“Cortando el ingreso de kerosene al VRAE se corta definitivamente un insumo importante que es usado para el narcotráfico en la elaboración de cocaína”, aseveró.
Brack Egg dijo que el uso de ese combustible en la zona, donde existen remanentes del terrorismo aliados al narcotráfico, es mínimo, ya que la mayoría de pobladores usa leña de los árboles para preparar sus alimentos.
“Lo que entra allí no es para consumo doméstico sino que termina como insumo para fabricar cocaína”, destacó.
El jefe del Gabinete Ministerial, Yehude Simon, informó que el Consejo de Ministros acordó reducir en al menos 80 por ciento la cantidad de kerosene que llega al VRAE como una forma de atacar directamente al narcotráfico y al terrorismo que opera en esa zona.
Simon informó también que el Ejecutivo distribuirá cocinas a gas entre las familias pobres de la zona con la finalidad de reducir aún más la dependencia sobre el kerosene.