Un equipo de especialistas en derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas mostró su rechazo ante los casos de adultos, niños y niñas lesbianas, gay, bisexuales y transexuales que son clasificados como patologías médicas.
Estos expertos invocaron a los gobiernos a poner fin a las clasificaciones médicas que etiquetan como enfermos a los adultos, niños y niñas LGTB. También afirmaron que estas categorías médicas someten a las personas con distinta opción sexual a tratamientos forzados como esterilizaciones, cirugías y tratamientos psiquiátricos como “terapias de conversión” al suponer que estas personas padecen alteraciones mentales.
Por otro lado, se reveló que estas clasificaciones médicas provocan daños psicológicos irreparables que pueden desencadenar en suicidio, autolesiones y graves cuadros de depresión. No obstante, otros factores como la violencia, el acoso o “bullying” homofóbico también pueden propiciar dolor físico y mental en las personas con identidad de género y orientación sexual distinta.
Asimismo, los expertos sostuvieron que ser lesbiana, gay bisexual o trans es parte de la biodiversidad humana y que la Organización Mundial de la Salud dejó de considerar a la homosexualidad como una enfermedad hace 26 años. Por ello, instaron a promulgar leyes que eliminen políticas discriminatorias y fomenten el respeto a los derechos fundamentales de las personas LGBT.