El presidente ejecutivo de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), Rubén Vargas, declaró que hay serios errores de cálculo en el último reporte publicado por la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca, sobre la superficie cultivada con hoja de coca en el Perú para el 2019. Agregó que debido a esos errores se sobredimensiona en más del 35% el crecimiento de los cultivos ilícitos, poniendo en duda el compromiso del Perú en la lucha contra las drogas.
De acuerdo con lo señalado por el titular de Devida, el primer error de la ONDCP al estimar la superficie cultivada con hoja de coca en el Perú durante el 2019 radicaría en no tener en cuenta a las hojas de coca que se destinan al consumo tradicional y a los usos industriales, que en el Perú son legales.
Según estudio hecho el 2019 del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) por encargo de Devida, poco más de 9000 hectáreas de hoja de coca se destinan a abastecer esta demanda tradicional e industrial lícita. “Cerca de 6 millones de peruanos consumimos hoja de coca todos los años y eso nunca llega a transformarse en cocaína”, dijo Vargas, quien remarcó que esto viene siendo señalado a la ONDCP desde el 2018. Como se sabe, a diferencia de Colombia, en el Perú se reconoce el consumo tradicional de hoja de coca debido a sus orígenes ancestrales.
Por otro lado, el segundo error de cálculo de la ONDCP se debe a que no se estaría considerando el total de la superficie que fue erradicada durante el año pasado y que superó las 25,000 hectáreas. “No se ha reconocido el enorme esfuerzo que hizo el Estado peruano para erradicar los cultivos ilícitos de hoja de coca que invadían parques nacionales y los territorios de comunidades nativas”, remarcó Vargas Céspedes.
De acuerdo con análisis realizado por Devida, más de 18 000 hectáreas de las 25 000 que fueron erradicadas durante el 2019 no fueron consideradas al momento en que la ONDCP emitió sus los resultados finales para este año. “Si se consideran el total erradicado la superficie cultivada superaría ligeramente las 53,000 hectáreas y no las 72,000 que indica erradamente el estudio de la ONDCP”, acotó Vargas Céspedes.
En lo que corresponde a la estimación de la producción potencial de cocaína se habría cometido un tercer error de cálculo. Según Devida, la estimación de la ONDCP debe tener en cuenta las más de 100 toneladas de cocaína que no se producen con la hoja de coca que se destina al consumo tradicional e industrial. A esto debe sumarse que, debido a las acciones de erradicación de cultivos ilícitos, durante el 2019 se evitó la producción de poco mas de 206 toneladas de cocaína. En total, 306 toneladas de cocaína deben restarse a las 705 que la ONDCP estima de manera errada para el 2019, por lo que en total la producción potencial no habría superado las 400 toneladas métricas.
En línea con lo reportado por la Cancillería del Perú, Vargas Céspedes señaló que estos errores fueron advertidos mediante comunicaciones telefónicas y notas diplomáticas a la ONDCP y al Departamento de Estado de los Estados Unidos. En ese sentido, lamentó que, a pesar de estas comunicaciones, hayan persistido estos errores de cálculo que generan una lectura errada sobre el importante esfuerzo que viene haciendo el gobierno peruano en la materia.
Cifras oficiales sobre cultivos ilícitos se publicarán en octubre del 2020.
En el marco del Sistema de Información para la Lucha Contra las Drogas (SISCOD), Devida y la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC) vienen trabajando la elaboración de la información oficial sobre la superficie cultivada con hoja de coca en el Perú.
Según el director de Asuntos Técnicos de Devida, Nicolás Zevallos Trigoso, estos resultados serán presentados en octubre del presente año. “Con el apoyo de Unión Europea y el acompañamiento metodológico de UNODC estamos materializando el modelo peruano para el monitoreo de cultivos ilícitos y de cocaína”, señaló.
Según Zevallos Trigoso, el monitoreo de cultivos tendrá información histórica y detallada a nivel distrital, lo que permitirá focalizar y diferenciar mejor las intervenciones, ya que se podrá conocer las tendencias locales de los cultivos ilícitos y de la producción ilícita de cocaína. En esa línea, recordó que el SISCOD ya viene publicando un reporte mensual de precios de hoja de coca y derivados cocaínicos.
“Junto al monitoreo de cultivos ilícitos, el SISCOD ofrece un paquete de información vital para evaluar y transparentar los avances de la política de drogas del Estado peruano”, recalcó.