CAJAMARCA. Inocencio Hernández, integrante de la Asociación de productores Valle Hermoso de Selva Baja, comenta cuáles son los impactos del cambio climático en la producción del cuy, además de algunas acciones posibles para frenar los cambios de temperatura. Estas declaraciones las brindó en el último programa de Diálogos Al Aire, producido por Inforegión en alianza con el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), difundido a través de Radio Campesina, en Cajamarca.
La Asociación de Productores de Valle Hermoso está conformada por 21 socios (11 hombres y 10 mujeres). Esta se inició en el año 2000, pero recién en el 2016 pudieron formalizarse. En esta agrupación, los varones apoyan en la siembra de cultivos, mientras que las mujeres se dedican a la crianza de cuyes. «Las mujeres le dan de comer al cuy y los hombres ayudamos a acarrear la pastura para alimentar a los cuyes», sostiene Hernández.
En el Perú, aproximadamente 800 mil familias se dedican a la crianza de cuyes. Los principales productores se encuentran en regiones como Junín, Pasco, Huánuco, Lima, Arequipa, Cusco, Puno, Cajamarca, entre otras. Inocencio refiere algunos de los retos que han tenido que afrontar en el 2022. Uno de ellos ha sido la escasez de agua debido al impacto del cambio climático. Además, resalta que necesitan más apoyo para continuar fortaleciendo el negocio.
«En noviembre, hemos tenido casi un mes de verano. Eso trajo escasez de agua y los manantiales han desaparecido. Estamos pensando qué hacer o acudir a organizaciones para que nos brinden su apoyo», alerta nuestro entrevistado.
En este sentido, el proyecto Avanzar Rural es una de las organizaciones que ha ayudado en el tema de la comercialización del cuy. «Ellos nos ayudan en la crianza del cuy. Por el momento estamos vendiendo solo cuy vivo. Ojalá el cambio climático ya no nos afecte mucho para sembrar y producir más», afirma.
Además del apoyo necesario por parte de organizaciones, Hernández afirma que se debe tener en cuenta la arborización de los manantiales. «Sembrar árboles es importante, pero árboles de nuestro lugar. Porque con el pino no hemos tenido buenos resultados», advierte.
Por otro lado, la Asociación de productores Valle Hermoso de Selva Baja también ha iniciado con la crianza de truchas. «En ese tema nos va bien, hay consumo al igual que con la comercialización de cuy». afirma Hernández.
Actualmente, esta agrupación está buscando no solo comercializar cuyes, sino poder industrializar el producto. «Nos hemos presentado para obtener una sala para el empacado del cuy. Ya hemos ido a competir para obtenerlo», finaliza.