El experto en temas de narcotráfico y seguridad Rubén Vargas señaló que el nuevo plan anunciado por el gobierno para enfrentar la situación de narcotráfico y terrorismo en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) sería solo la repetición de los errores cometidos en la primera estrategia que ha costado la vida de decenas de militares.
“Si el ministro de Defensa ha señalado que no van a cambiar las cosas y la estrategia militar va a ser la misma, entonces no creo que sea un nuevo plan. En todo caso, es la reiteración de los errores del anterior”, opinó en el programa radial Diálogo Ciudadano que emite INFOREGIÓN.
Al respecto, recordó que la primera gran emboscada que sufrió el Ejército peruano y que costó la vida de 15 militares sucedió en octubre del 2008 en la zona de Tintay Punco, en pampas Tayacaja, región Huancavelica.
Sostuvo que esa emboscada se produjo por una inadecuada dirección de las operaciones militares, situación que se repitió recientemente en el caso del ataque en Sanabamba a dos patrullas de las Fuerzas Armadas.
“Quién fue el militar que permitió que este contingente se trasladara en horas de la noche por unas zonas donde se presentaron reiteradas veces emboscadas terroristas tanto a la Policía como al Ejército (…) Eso es un error estratégico, es un error táctico y operacional dentro del campo militar”, dijo el analista con relación a la emboscada del 2008.
“Ese es un error que está ocasionando la muerte de los soldados, entonces no podemos seguir con un error así porque cuestan vidas humanas”, reflexionó.
SL no es enemigo convencional.
Del mismo modo, el analista indicó que las cabezas militares enfrentan erróneamente a los terroristas de Sendero Luminoso (SL) que operan en el VRAE, pues se pelea contra ellos como si se tratase de un enemigo convencional.
“Qué ha pasado esta última emboscada en Sanabamba (…) Se están utilizando estrategias y tácticas de combate de guerra convencional (…) se olvidan que estamos enfrentando a un enemigo que no es convencional. Es un grupo terrorista extremista en su ideología que utiliza la guerra no convencional, la guerra de guerrillas”, reclamó.
Consideró que las dos más grandes emboscadas que se han producido en el VRAE son responsabilidad de la conducción militar. Por eso – precisó – se deben realizar algunas correcciones.
“No esperemos a que mueran más de diez muchachos que están prestando servicio militar voluntario para volver a comentar y a hacer las mismas críticas. La verdad que esto ya linda con la responsabilidad penal”, enfatizó.
“Yo espero que sea solamente un anuncio que va a seguir con una reflexión más profunda y que dé un nuevo plan VRAE y no se repitan los errores que están ocasionando la pérdida de vidas humanas”, finalizó.