El anuncio de las autoridades educativas de Ayacucho de iniciar indefectiblemente las clases escolares el dos de marzo, no fue cumplido por ninguna institución educativa de la Región.
Se observaron locales sin alumnos, profesores reunidos para programar recién el inicio de las clases la próxima semana, padres de familia matriculando a sus hijos a última hora, aulas en estado deplorable, servicios higiénicos descuidados y mobiliario escolar práctiamente destruido.
Lo más grave fue que algunos padres y alumnos recién se enteraban de los resultados del Programa de Recuperación Académico para Aplazados, lo que indicaría que los profesores no entregaron las notas a tiempo.
Entretanto, los padres de familia lamentaron que las clases deban iniciarse recién el próximo lunes 9 de marzo.
En los colegios estatales Mariscal Cáceres, Nuestra Señora de las Mercedes, Señor de la Agonía, Villa San Cristóbal, Luis Carranza, entre otros, la ausencia de los estudiantes fue total.
Sí asistieron los docentes, pero no dictaron clases, sino que participaron en “reuniones de programación”.
Mal estado de un colegio emblemático
Sillas rotas, ventanas sin vidrios y salones sucios. Mobiliario escolar insuficiente y en pésimo estado, servicios higiénicos deplorables.
Esa es la situación del centro educativo símbolo de Ayacucho, conocido por muchas generaciones como la Gran Unidad Escolar Mariscal Cáceres.
El patio de honor, en donde los alumnos forman diariamente antes y después de las clases, ha sido invadido por pasto que, ante el abandono, ha crecido en las intersecciones de los paños de cemento.
Los servicios higiénicos que serán usados por más de 3.000 alumnos de los turnos mañana, tarde y noche, tienen las tuberías colapsadas. Las paredes de las aulas están sucias, llenas de garabatos o despintadas y el mobiliario escolar está en deplorables condiciones.
Cobros excesivos a padres de familia
INFOREGIÓN pudo conocer que los colegios estatales y particulares de Ayacucho vienen cobrando dinero en forma irregular a los padres de familia, por concepto de matrícula.
De acuerdo as las denuncias de los indignados padres, de no hacerse efectivo ese pago, las autoridades educativas amenazan con no matricular a los alumnos.
Juana Gómez, madre de familia del colegio Villa San Cristóbal, se quejó por los cobros excesivos de la Asociación de Padres de Familia, APAFA y lamentó que las autoridades del Ministerio de Educación no sancionen a los responsables.
Ella tuvo que pagar 60 soles que no estaban en su presupuesto:
“Me dijeron que eran 30 soles por no haber asistido a tres asambleas generales, 10 soles por derecho de APAFA, otros 10 soles para implementos deportivos y 10 soles adicionales por la inauguración de las aulas que se están construyendo».
“Es indignante el aporte de 10 soles para la inauguración de las nuevas aulas, si se considera que hay 800 alumnos. ¿Acaso se va realizar una fiesta a lo grande?”, finalizó.