Existen indicios suficientes para señalar que los insumos químicos encontrados en el ex campamento minero de Michiquillay, recuperado ayer por efectivos de la Policía Nacional, eran destinados al narcotráfico.
El jefe de la Región Policial de Cajamarca, coronel PNP Alfonso Chavarri, precisó que las ilegales sustancias habrían sido destinadas para las actividades de narcotráfico en las zonas de Cajabamba, Chota, así como del río Marañón y Balsas.
Durante la operación se incautó gran cantidad de insumos químicos y productos elaborados como ácido sulfúrico, cloruro de amonio y óxido de cal. Asimismo se descubrieron tres pozas de diez metros de largo, tres de ancho y dos de profundidad, donde eran enterrados los insumos con elementos protectores.
Según la policía, existe un incremento de sembríos de hojas de coca y elaboración de clorhidrato de cocaína, así como de la presencia de cárteles mexicanos en la parte baja de Chugur–Chota, las zonas aledañas de río Marañón, la localidad de Santa Rosa y el valle de Condebamba. También, la existencia de grandes extenciones de amapola, con la cual se produce el látex de opio, en zonas de Celendín, Cortegana,