Esta madrugada, la Policía de Carreteras intervino en la ruta Tingo María a Huánuco al automóvil perteneciente a la empresa Comité N° 5 en cuyo interior viajaba Serafina Villar Sánchez (57), quien tenía adherido a su cuerpo, entre sus polleras, 4 kilos con 800 gramos de clorhidrato de cocaína.
En su defensa, la anciana manifestó que una señora le entregó la mercancía en el caserío de Huayna Cápac para ser traslado hasta el puente Calicanto, en Huánuco, por un pago de US$ 50 dólares americanos.
La abuelita condujo a la policía hasta el caserío de Huayna Capac, en el centro poblado menor de Castillo Grande, en la provincia de Leoncio Prado, para identificar a la propietaria de la droga, pero ésta había huido de su domicilio, una casucha con palos y palmeras secas. La anciana tiene dos nietos en su poder de siete años y nueve años, quienes al momento de su detención se encontraban en la escuela.