El teniente general FAP (r) Carlos Bohórquez afirmó que el Sistema Nacional de Vigilancia Amazónico y Nacional (Sivan) no está plenamente operativo y sus capacidades distan mucho de ser óptimas contra diversos tipos de amenazas, entre ellos el sobrevuelo de narcoaviones sobre la selva nacional.
“Yo sé que hay un promedio de cinco aeronaves diarias que están entrando, que se llevan hasta 500 kilos de droga al día. Es terrible. Se necesita de un esfuerzo grande para impedir esto”, dijo al diario Correo.
El militar aseveró que los sobrevuelos de los narcoaviones sobre la selva nacional se producen sin ningún tipo control.
Bohórquez Castellares rememoró que es a partir del 2001, cuando ocurre el incidente de la seminarista norteamericana, que el tema cobró un matiz contrario para la seguridad del país.
Como se recuerda, aquel año la misionera Verónica Bowers y su hija Charity fallecieron cuando un avión A-37 de la FAP derribó la avioneta Cessna en la que viajaban con otros pasajeros estadounidenses, al ser identificada erróneamente como una narcoavioneta.
A partir de ese incidente, Washington ordenó la suspensión de los vuelos de interdicción en nuestro país. Alertó que actualmente solo contamos con un único radar que opera en Puerto Maldonado.
Finalmente, el teniente general (r) comentó que se precisa tener la plena habilitación del Sivan. Además de la información aérea, este sistema proporcionaría otros tipos de informaciones, como saber dónde están las pistas clandestinas, dar detalles sobre dónde están las plantaciones de hoja de coca, con imágenes hiperespectrales.