A través de un comunicado, la nación Wampís y el pueblo Achuar del Pastaza cuestionaron el modo cómo la industria de los hidrocarburos se desempeña en el país. Rechazaron toda actividad petrolera en el lote 64 al considerar que se asienta sobre «nuestros territorios comunales y ancestrales». Además, expresaron su solidaridad con los afectados en el derrame de crudo en Ventanilla, resaltado que hechos así «vienen ocurriendo en la Amazonía peruana de manera cotidiana». Seguidamente, compartimos el comunicado:
«La Nación Wampís y el Pueblo Achuar del Pastaza, a través de nuestras instituciones representativas, damos a conocer a la opinión pública nuestra posición de rechazo a la actividad petrolera del lote 64 que está concesionado sobre nuestros territorios comunales y ancestrales.
Derrames como el ocurrido en Ventanilla, y el impacto que éstos generan en la vida de los seres vivos, son impactos que vienen ocurriendo en la Amazonía peruana de manera cotidiana. Nosotros somos testigos y víctimas de impactos en nuestros territorios que siguen sin ser remediados, y de los gravísimos impactos que se han dado en las operaciones de los lotes petroleros 192 y 8, donde viven nuestros hermanos Achuar de la cuenca del río Corrientes, Quechua, Kichwa, Urarina y Kukama en los últimos 50 años.
Además, las normas que rigen la industria de hidrocarburos en nuestro país no ofrecen ninguna garantía y más bien siguen demostrando ser una amenaza real para la vida y para el medio ambiente.
Es por esta razón que venimos rechazando una actividad que consideramos incompatible con el funcionamiento de la naturaleza y con las aspiraciones que tenemos para nuestro pueblo y para nuestras futuras generaciones; porque ambos objetivos están unidos profundamente. Ahora y siempre, no a las operaciones en el lote 64. Demandamos la nulidad del lote y el respaldo a nuestras iniciativas de actividades económicas compatibles con la conservación ambiental.
La Nación Wampís y el Pueblo Achuar de Pastaza, se solidariza con la sociedad civil y pescadores afectados por el derrame de petróleo de Ventanilla y esperamos que las entidades responsables realicen las acciones de limpieza y remediación respectiva y, sobre todo, la restauración ambiental, además de las sanciones penales correspondientes. Así mismo, esperamos poder contar con el apoyo de la opinión pública y de la sociedad civil organizada en nuestra lucha por la vida, la naturaleza y el futuro para todos y todas».